Ecologistas cree que el POTLA busca "legalizar" proyectos como El Algarrobico y recurre al TSJA

ALMERÍA.- El colectivo 'Ecologistas en Acción' ha interpuesto un recurso contencioso-administrativo ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) en el que solicita anular de forma parcial el Plan de Ordenación del Territorio del Levante Almeriense (POTLA) al considerar que trata de "legalizar" proyectos urbanísticos tan "groseramente ilegales" como los previstos para la totalidad del paraje de El Algarrobico, en Carboneras, mediante la creación de la figura de Zona de Reserva Residencial y Turística al norte del municipio.

La demanda, interpuesta el pasado día 28 ante el Alto Tribunal andaluz, pide, en concreto, que se anulen las previsiones del POTLA, en vigor desde el pasado mes de marzo, con respecto a Carboneras, además de con respecto a Vera y Cuevas del Almanzora. Interesa, asimismo, la adopción de medidas cautelares que han derivado en la incoación de un pieza separada de la que ya se ha dado traslado para aleguen tanto a la Junta de Andalucía como a los ayuntamientos de los tres municipios.

La organización conservacionista se opone fundamentalmente a siete de las disposiciones de este instrumento de planeamiento urbanístico de "rango superior" sobre el urbanismo en Carboneras y en los suelos adyacentes a donde se levanta el hotel de Azata del Sol.

Así, critica que el POTLA clasifica como urbanizables los terrenos que rodean tres sectores en el Algarrobico que el Ayuntamiento pretende desarrollar pese a estar dentro de los límites del parque natural Cabo de Gata-Níjar, lo que supone "soslayar" el cumplimiento de la LOUA que prohíbe fomentar la creación de nuevos núcleos urbanos de población.

En concreto, sostiene el recurso que se trata de acercar los tres sectores al centro del municipio de Carboneras, del que están separados por varios kilómetros, y, por tanto, de "legalizar" los proyectos "ilegalizables por las vías habituales" en el Algarrobico y en otra zona conocida como el Canillar, propiedad de la misma mercantil que promovió el polémico hotel ya que posee todos los terrenos que integran la zona conocida como La Galera.

En esta línea, critica el trato dado a otras fincas como La Loma de La Cañada y la Torre del Rayo, ubicadas también en la Zona de Reserva Residencial y Turística de Carboneras al igual que La Galera, lo que da "vía libre" a la "destrucción completa de la desembocadura del Río Alías". Y es que, a juicio de Ecologistas en Acción, esta figura tiene como finalidad unir el sector aislado de El Algarrobico al núcleo urbano.

El recurso contra el plan, que se publicó en BOJA el 24 de marzo de 2009, alude a que éste "legitima" la enajenación de 63,2 hectáreas de monte público no urbanizable que se realizó por parte del Ayuntamiento "plagada de irregularidades, no mediante subasta sino por concurso y a un precio irrisorio" y que dio lugar a lo que hoy se conoce como La Torre del Rayo y La Loma de la Cañada.

Propiedad una de la mercantil Promociones Mirador de Carboneras S.L. y la otra de la mercantil Unicarboneras S.L. fueron reclasificadas a urbanizables por el Ayuntamiento ocho meses después de que se formalizase su venta en enero de 2003 "sin cumplir" el Reglamento Forestal de Andalucía y han sido objeto de incoación de diligencias de investigación por parte de la Fiscalía de la Audiencia Provincial de Almería.

En la zona de la Torre del Rayo, el plan "no tiene en cuenta" además la existencia de un monumento catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC) y el área de oportunidad residencial que pide que se suspenda "vulnera", según subraya el escrito presentado ante el Alto Tribunal andaluz, lo establecido para la protección y promoción de los miradores de primer orden donde se prohíbe las construcción a 500 metros de su perímetro.

En el caso de Vera y Cuevas del Almanzora , estima que el plan "obvia" las instrucciones amitidas por el Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (Ciemat) en 2007 acerca de los terrenos contaminados radioactivamente en la barriada de Palomares tras la caida accidental de en 1966 de dos de las cuatro bombas termonucleares que transportaba un bombardero de EEUU.

Señala Ecologistas en Acción que los dos consistorios "tienen intención de urbanizar los suelos contaminados" en Sierra Almagrera mientras que el POTLA adolece de "inconcreción y ambigüedad" al calificar los suelos "tratando de disimular el problema en lugar --ahonda el recurso-- de advertir con caracteres destacados e indubitados sobre el peligro que encierra construir en una zona sumamente peligrosa donde se levantaría polvo cargado de plutonio poniendo en peligro vidas humanas".