martes, 30 de septiembre de 2014

Pespuntes para un saco roto / Gabriel O. Sánchez

Pespuntes, eso y no otra cosa es el arreglo que la secretaria general socialista Susana Díaz le ha dado al saco, antes granero, donde el PSOE almeriense guarda los pocos votos que le quedan. Un saco con tantos remiendos que pasadas las municipales comenzará a romperse por mil y un sitio tras el arreglito impuesto desde San Telmo, pasando por encima de las bases y sin importarle lo que estas opinen. Hoy por hoy ser militante carece de importancia si no es para pagar la cuota cuando los dictámenes que desde Sevilla llegan, hay que acatarlos, sí o sí.

Un grave error del que no tardando mucho Susana Díaz se arrepentirá. Mucho más teniendo en cuenta que con dicho acuerdo gran parte de la militancia, los simpatizantes y los votantes están en desacuerdo a pesar de que unos los hayan acatado por miedo a moverse y no salir en la foto y el resto, me refiero a los socialistas de a pie, porque les han impedido expresarse.

Sólo hubo que ver la cara a Joaquín Jiménez Segura durante su comparecencia antes de que el impuesto Pérez Navas tomase la palabra, para ver, que está en disconformidad con lo que entendemos Susana Díaz, ha dispuesto. Sin embargo la elegancia con la que encaró el reto y la claridad con la que Jiménez se explicó, habla mucho en su favor. Sin medias tintas dejó claro que no era una decisión suya, pero que era un hombre de partido y que acataba la imposición.

Lo sucedido corrobora lo que muchos pensamos. No hay democracia interna dentro del PSOE por más que así quieran hacérnoslo ver.

Susana Díaz se ha equivocado colocando como cabeza de lista a Pérez Navas e impidiendo que las bases se pronuncien, no les quepa duda. Tanto hablar de democracia, y miren por donde yo y muchos como yo, no la vemos. Seguramente porque al margen de las grandilocuentes palabras de la presidenta hablando de este nuevo y renovado partido, más participativo y abierto, la realidad dentro del PSOE es bien distinta. En el PSOE, la democracia brilla por su ausencia, para muestra un botón.

Consenso, integración, acuerdo; palabras repetidas hasta la saciedad que esconden bajo cada letra la mentira y el odio encarnizado de dos facciones, una de las cuales no ha soltado el cuchillo desde que la mano dura del clan cuévano cayese en desgracia y abandonase la dirección del partido. Esa y no otra es la realidad del PSOE almeriense, donde unas cuantas familias que dicen ser socialistas, manejan el partido cual caudillos, a su conveniencia, de manera dictatorial, a golpe de decreto, con insidias y confabulaciones, repartiéndose los cargos, familiares incluidos.

Estos que han gobernado el PSOE durante décadas han utilizando la táctica de “cuantos menos, mejor” como premisa, para de esta forma, controlar el partido y mantener sus intereses.

Sirva de ejemplo que de los 1.400 militantes con los que el PSOE de la capital contaba, no quedan más de 800. Eso supone que en torno al 45% de los militantes se han dado de baja, hartos, cansados, o aburridos de ver como estos iluminados deciden por ellos, viven a cuerpo de rey y utilizan sus votos para manejar un partido como si de su cortijo se tratara.

Algo tendrá el agua cuando la bendicen estos santos barones que tienen como objetivo seguir viviendo del incauto militante y utilizar el PSOE en su beneficio y no en beneficio de la sociedad. Esto es algo que vienen haciendo desde hace tres décadas estos ideólogos de pacotilla, conscientes que, controlando el partido, obtienen poder y mantienen privilegios.

Y si ante los micrófonos unos y otros; guerristas y renovadores, hablan de unidad, en petit comité y por separado, ambos son conscientes de que dicha cohesión, es ficticia.

 Pero, ¿a quién beneficia este acuerdo?

Desde luego al PSOE no, pero cuando hablo del PSOE, no les hablo de sus asalariados dirigentes, me refiero a los soldados del partido, esos a los que los generales utilizan y no comparten los honores. Dicho de otro modo, a los militantes, simpatizantes y votantes que verán su voto caer en saco roto.

Si les preguntamos a las dos facciones una y otra dirán que ha ganado el partido, pero, ¿realmente ha ganado?

Analicemos la situación.

Resulta evidente que los guerristas, cuyas cabezas visibles son Amate, Martínez y Bonilla, han conseguido imponer a su candidato. El acuerdo ha sido un gol por toda la escuadra en la portería de los que avalaron a Susana Díaz y ahora ella traiciona. Cabe saber si la dirección provincial del partido ha alzado la voz en Sevilla. Tengo mis dudas, más bien considero que han agachado las orejas.

 Pero ¿es Susana consciente de que con un candidato como Pérez Navas las elecciones están de antemano perdidas?

Mi opinión es que sí. La razón puede estar en las encuestas que el PSOE regional maneja. Si dichas encuestas son similares a las que otros medios tratan, la alcaldía seguirá en manos de los populares. Cabe suponer entonces que pueda tratarse de una estrategia contra el candidato guerrista falto de sangre y sin carisma, que Sevilla ha colocado. Si así fuera el caramelo envenenado que con ansia ha degustado Pérez Navas, se le atragantará ya que, perdidas las elecciones a la alcaldía, Pérez Navas y los que lo sustentan serán historia.

Y los renovadores, ¿ han ganado?

Está claro que tampoco. El desprecio cometido con las bases no dejando que se pronuncien y la injusticia cometida desde Sevilla con Joaquín Jiménez, pasará factura al PSOE capitalino que, a buen seguro, podía haber obtenido con Jiménez como cabeza de lista mejores resultados. Recordemos la dura oposición que el sacrificado Jiménez  ha llevado acabo como portavoz de la oposición en el Ayuntamiento, mientras Pérez Navas ha ocupado su mullido escaño en el Senado.

Una pregunta que muchos nos hacemos es ¿que pasará tras las municipales si vuelve a ganar el PP? ¿Se quedará Pérez Navas en el banquillo del salón de plenos municipal como líder de la oposición, batiéndose el cobre como hasta ahora lo ha hecho Joaquín Jiménez, o volverá a su cómodo y bien remunerado retiro en el Senado?

Yo se lo diré como si catalán fuese, “la pela es la pela”.

 La pregunta que ahora me hago es ¿tomará entonces Susana Díaz la determinación de exigirle a Pérez Navas que deje el escaño en la cámara alta y se mantenga como concejal en la oposición?

Bajo mi punto de vista, está obligada. Si así fuera, tal vez entonces, con las viejas y trasnochadas glorias socialistas fuera de la política provincial, se vea, por fin, la tan manida y cacareada regeneración del PSOE almeriense.

viernes, 19 de septiembre de 2014

Las primarias del PSOE en la capital / Gabriel O. Sánchez

Anteayer, alguien con el que hablé brevemente por teléfono me comentó algo  que me hizo pensar.
Poco antes escuché una declaración en la radio del secretario general socialista, José Luis Sánchez Teruel, hablando sobre los dos previsibles candidatos a las primarias almerienses; uno, y esto lo digo yo, de la nueva guardia (Joaquín Jiménez Segura) y el otro, de la vieja guardia (Juan Carlos Pérez Navas).
Sánchez Teruel, como siempre, estuvo en su papel conciliador, ese que hace pensar que "to er mundo es gueno", que los dos son unos candidatos ideales. Vaya, que de mojarse por uno o por otro, "na de na". Nada que reprocharle, es entendible.
Sin embargo lo que bajo las alfombras socialistas subyace no es lo mismo que se aprecia sobre las mismas. Lo diga o no Sánchez Teruel, la mierda hace tiempo que se viene acumulando debajo. La razón está en la escasa limpieza que se hizo cuando Diego Asensio saliese por la puerta de atrás de la sede socialista y llegando los suplentes les faltara coraje para hacer una limpieza a fondo. Lejos de sanear pensaron que era mejor la concesión de algún puestecito, al hijo de éste o al familiar de aquel, esperando así un acercamiento y no una confrontación.
Poco después el habilidoso Fernando Martínez consiguó con su designación como secretario general de Almería la cuota de poder perdida por los guerristas. Este fue un plan perfectamente diseñado.  Pero, conseguida la primera parte del plan, se ha puesto en marcha la segunda; esta no es otra que colocar a su candidato, es decir a Pérez Navas, en la carrera por la alcaldía, una vez que consiga hacerse con las primarias.
Aparentemente Pérez Navas lo tiene fácil; con apoyos como los del infumable Amate, el habilidoso Bonilla o el estratega Martínez la cosa parece clara. Lo peor para el candidato primario, rehén político de estos tres, es el batacazo que le espera, pues difícilmente le quitará la cartera a Luis Rogelio Rodríguez Comendador quien, tras colocarle en el Ayuntamiento a su mujer, lo tiene fácil para pararle los pies.
 Luis Rogelio debe estar frotándose las manos. No me extraña. El resultado más que predecible no será otro que la quema política de Pérez Navas y, en cuanto al PSOE, cuatro años más en la oposición. Yo en el lugar de Pérez Navas, daba la espantá y me seguía quedando de cabeza de ratón.
 Si Fernando Martínez viese alguna posibilidad de conseguir la alcaldía, no le hubiera cedido el testigo a Pérez Navas; denlo por hecho.
 Sin embargo hay que reconocer que  Fernando Martínez tiene  mucho  más tirón del que tiene el lánguido Pérez Navas. Un tirón que  Martínez sabe insuficiente para que, con las rémoras que acarrea de su época en la alcaldía y las intrigas que gestiona en su propio partido, traducido en una merma de votos, pueda quitarle la alcaldía al PP. De ahí que haya colocado a Pérez Navas de cabeza de turco, por si la casualidad,  el agotamiento del PP o incluso la entrada de Podemos, hace sonar la flauta.  
Demasiadas hipotéticas casualidades, que dándose, gobernando Pérez Navas, gobernaría él.

jueves, 18 de septiembre de 2014

¿Qué juez le pondrá el cascabel al gato? / Gabriel O. Sánchez

Que el todopoderoso Amat maneja gran parte de los medios de comunicación de Almería es de sobra conocido. Ya lo hacía financiando a un canal de tv de Aguadulce, en su época de concejal de Urbanismo y luego como alcalde en Roquetas de Mar. El tema debió gustarle, seguramente pensó que controlando los medios ningún periodista se atrevería a meter las narices en sus negocios. No se equivocó, al menos al principio. Ahora la cosa parece ir cambiando, algunos periodistas empiezan a alzar la voz, otros lo hicimos hace mucho tiempo y sufrimos las consecuencias.
En  la actualidad son numerosos los medios sobre los que,  directa o indirectamente, decide y por consiguiente,  controla. Pero hacerlo en la actualidad resulta más fácil para Amat, que en aquella época en la que empezaba a hacer sus pinitos “polanquiles” Sin embargo algo ha cambiado, Amat ya no necesita comprar ningún medio o intervenir en la compra de otros, como fue el caso de Popular TV a pesar de que su poder económico sea mucho mayor. Realmente no necesita hacerlo; ello se debe al enorme poder político que ostenta, tanto o más del que tuviera Fabra en Castellón.
Lo difícil para un medio en estos tiempos es no plegarse a sus dictámenes y convertirte en su vocero, toda vez que hacerlo, es quedarte sin publicidad.
 Pero Amat ha aprendido tanto que ahora controla los medios sin gastar un solo duro de su bolsillo mientras pueda hacerlo con dinero del erario público, vía publicidad o patrocinio, ¡para que gastar del suyo! 
La realidad es que gran parte de los medios, bailan al son que él toca y ello no resulta difícil cuando quienes controlan o dirigen estos son gente de su onda o  gran parte de sus ingresos depende de la voluntad publicitraria de Gabriel Amat.
 Y hablando de onda o de “Herrera en la Onda”, ese programa que el afamado presentador Carlos presenta y dirige y de cuya turné por Almería disfrutamos desde la casa de Gabriel Amat, o dicho de otra forma, desde la Diputación Provincial que el ínclito político dirige como si de su cortijo se tratara.  
Es importante conocer que dicho programa ha sido denunciado ante la Fiscalía por la Asociación Mediterránea Anticorrupción y por la Transparencia (AMAyT). La razón está en la argumentación que dicha asociación ha hecho denunciando que el  programa  le costó a los almerienses la nada despreciable suma de 102.850 euros.  Lo que equivale a 260 euros por minuto de emisión o lo que es lo mismo 16.000 euros por cada hora, a lo que a buen seguro habrá que sumarle comidas, alojamientos etc, etc, etc…, otros gastos que a buen seguro irán saliendo a la luz.
Sin embargo para que no se me malinterprete, nada que decir de Carlos Herrera, quién está en su derecho de poner precio a su trabajo. Es Gabriel Amat quien debe dar explicaciones, ya que fue él, en gran medida, el beneficiado, pues una vez más los elogios que el presentador le echó le salieron gratis. Era de esperar, ¿acaso no es él, el que paga?. Pero Amat, como de costumbre, no echó mano a su chequera, echó mano a la caja, esa a la que van los impuestos que los almerienses pagan y de la que él sacó el parné para pagar el programa. Así que si usted no escuchó el programa  jódase y no patalee pues su parte correspondiente tendrá que pagarla igualmente.
 Aquel que piense que Amat es tonto, se equivoca. Dotado de una inteligencia natural que sorprende, Amat es entre otras muchas cosas que de momento silencio, un gran vendedor, y como vendedor sabe hacerlo y vocearlo a la perfección. Éste te vende la manzana aunque esté podrida. 
Es de esperar que no tardando mucho comience a dar cifras argumentando que por cada euro invertido en el programa han venido a Almería diez. A ver quién dice que no, ya se encargarán los medios afines de repetirlo y repetirlo haciendo de una mentira una verdad, engañando así a la ciudadanía y haciendo de su nefasta gestión, un éxito. 
No obstante su mayor preocupación en estos momentos es evitar que los medios se hagan eco e investiguen la denuncia ante la Fiscalía y el bombo empiece a sonar.
¿Estaremos ante un  nuevo "caso Gurtel"?, según  la denuncia redactada por las abogadas Carolina Gutiérrez y Eva Liria, presidenta y vicepresidenta de la asociación AMAyT; esta va documentada con 70 folios y más de 1000 documentos públicos. 
Al parecer, la Justicia ha fijado por fin sus ojos en Gabriel Amat.  A través de AMAyT hemos podido saber que la Fiscalía Superior de Andalucía ha ordenado a la Policía Judicial que elabore un amplio informe sobre esta presunta trama de corrupción que afecta a 108 empresas y 315 órganos sociales.
Ahora cabe saber ¿qué juez se atreverá a ponerle el cascabel al gato?

viernes, 12 de septiembre de 2014

La promotora del hotel Algarrobico se opone al retracto y no asiste a la firma


SEVILLA.- La promotora del hotel Algarrobico se ha ausentado hoy de la firma ante notario con la que la Junta de Andalucía pretendía formalizar su derecho de retracto y recuperar la titularidad de las parcelas donde se levanta el inmueble a escasos metros de la orilla del mar en Carboneras. 

Una ausencia con la que han querido mostrar su disconformidad con la medida de la administración autonómica, especialmente cuando las últimas sentencias judiciales han fallado a favor de la promotora del hotel y de la legalidad del permiso de obras.
La Junta de Andalucía ya preveía esta situación, por lo que ahora emprenderán las medias necesarias para que se ejecute la sentencia que dictamina que el suelo donde se levanta el hotel, considerado un emblema de la construcción salvaje en la costa, es de titularidad pública, y en ultima instancia proceder a su derribo, según han confirmado fuentes de la Consejería de Medio Ambiente.