martes, 24 de agosto de 2010

Sí a la mezquita en el Puerto / Rafael M. Martos

Estamos en el mes santo de Ramadam, y los fieles musulmanes aguantan estoicamente este insoportable calor sin tomar una gota de líquido, sin comer nada, e intentando que ni siquiera entre en ellos el humo del cigarrillo de quien tiene enfrente. Así de duro es cuando el mes del ayuno cae en verano, con estos días tan largo, que aún se hacen más agotadores si se está de viaje cruzando la Península Ibérica en un viejo coche con media casa en la baca y la familia al completo dentro.

No parece que sea mucho pedir que estas personas puedan disponer de un lugar adecuado donde rezar. No parece que un sala en la que no hay poner nada más que luz y ventilación, sea un gasto que la Autoridad Portuaria no pueda permitirse. Que no hay que poner bancos, ni esculturas, ni altares, ni velorios... sólo un lugar donde, como es su origen etimológico, se puedan doblar las rodillas, una mezquita.

Por tanto, no resulta muy justificable que después de haberla previsto en el proyecto, ahora alguien decida eliminarla. Y mucho menos justificable es el argumento de que ya hay menos marroquíes que utilizan el puerto almeriense.

Da la sensación de que algunos prefieren quedarse ciegos con tal de que su enemigo quede al menos tuerto. Hubiera sido muy fácil dar paso a crear un espacio de culto religioso, un espacio que pueda ser utilizado por la comunidad religiosa que lo necesite, como ya pasa en muchos cementerios españoles.

Es decir, los hay que prefieren que no haya ningún lugar para rezar en el Puerto con tal de que ese sitio no pueda ser utilizado en algún momento (o de modo principal por una mera cuestión estadística) por musulmanes.

Pero ese otro argumento de los detractores de que son los católicos quienes pagan sus iglesias... bueno, eso no se sostiene ni con pegamento. En Vícar ha sido el Ayuntamiento -gobernado por el PSOE, por cierto- quien ha construido una iglesia, y no se recuerdan queja de nadie. Pero no es el único lugar en que esto pasa, e incluso si no fuera así, podríamos recordar la inmensa cantidad de bienes materiales que están manos de la Iglesia Católica y por la que esta obtiene beneficios económicos a la vez que desgravaciones fiscales.

Que la Constitución previera en su momento un trato preferencial a la Iglesia Católica no debiera ser motivo para que a día de hoy se mantenga, pero ya que se mantiene, al menos que eso no sirva para dar un trato discriminatorio a las demás religiones mayoritarias.

Lo que resulta también poco asumible es que en todas estas declaraciones se hable de musulmanes y de marroquíes indistintamente, cuando se puede ser marroquí y no musulmán y musulmán no marroquí. Y es que quienes hoy se oponen a la mezquita en el Puerto por lo ya referido, también se opondrían a construir una mezquita en otro punto de la capital o la provincia, buscando para ello cualquier excusa.

Es verdad que Marruecos no es un país que trate bien a los católicos. Es más, es un país que ha empezado a ejercer una presión inaceptable desde el punto de vista de los más elementales derechos humanos, contra los no musulmanes. Pero que esto lo haga un régimen como el que controla ese reyezuelo venido a menos que es Mohamed VI, no es raro, y nos tendría que animar a no ser como ellos.

Es más, el comportamiento de Mohamed VI contra los católicos se produce esencialmente por no ser él un buen musulmán, por mucho Comendador de los Creyentes que sea. Eso lo saben los buenos musulmanes, que no toleran su continua profanación de las normas coránicas. Por eso tiene que ser "el muy-muy y el más-más" acorralando a los cristianos, para que los suyos le perdonen, para despistar, como cuando agita la frontera de Melilla, o cuando les da patadas y los echa al mar en pateras, o abre la mano para que el hachís de la verde Ketama fluya hacia el norte.

Afortunadamente quienes hoy no quieren la mezquita en el Puerto -y en el fondo no quieren mezquitas en la Tierra de María Santísima- no eran los mismos que dejaron en pie la Alhambra de Granada, la Alcazaba de Almería, o la Mezquita de Córdoba.

El TSJA prohíbe al alcalde de Carboneras acometer actuaciones urbanísticas en El Algarrobico

ALMERÍA.- El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha acordado prohibir al alcalde de Carboneras, Cristóbal Fernández, (PSOE), que acometa actuaciones urbanísticas en el paraje de El Algarrobico y le ha advertido de que, de no acatar la medida, estaría incurriendo en un delito de desobedencia después de que la corporación local aprobase hace un año la adaptación de sus Normas Subsidiarias (NNSS) a la Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía (LOUA) en la que mantenía la calificación de urbanizable para el sector.

La providencia dictada por el Alto Tribunal andaluz requiere "personalmente" al regidor carbonero para que "se abstenga de cualquier actuación urbanística" en la zona donde se asienta el macrohotel promovido por la mercantil Azata del Sol y en la que se proyecta, además, la construcción de unas 250 viviendas "al estar pendiente de decisión judicial", subraya, el nivel de protección del parque natural Cabo de Gata-Níjar.

La decisión, contra la que ha interpuesto recurso de súplica el Consistorio de Carboneras que aún se tramita tras la impugnación de la organización Greenpeace, se enmarca en la pieza separada abierta por el TSJA en la que decretó, en noviembre de 2008, la suspensión cautelar de lo dispuesto respecto al paraje de El Algarrobico en el Plan de Ordenación de Recursos Naturales (PORN) en vigor desde nueve meses antes al considerar los tres magistrados de la sala que podría permitir el "uso efectivo" del macrohotel de Azata del Sol.

El Alto Tribunal andaluz prohíbe al socialista Cristóbal Fernández acometer actuaciones urbanísticas en esta zona del litoral carbonero después de que tres colectivos ecologistas pusieran en su conocimiento a finales de 2009 la existencia del acuerdo municipal donde la corporación local dio luz verde a una adaptación de su planeamiento en que continuaba clasificando el paraje de El Algarrobico como urbanizable y autorizaba, implícitamente, la construcción de 250 viviendas, lo que, a juicio de los demandantes, suponía desobedecer al tribunal que ordenó mantener el grado de protección que tenía en el anterior PORN.

En la providencia, la sala de lo contencioso-administrativo requiere al Consistorio el citado acuerdo de pleno, que se justificó por parte del Ayuntamiento en que adaptación de las NNSS a la LOUA es de un procedimiento "y no un instrumento de planeamiento", por lo que, a su juicio, no puede "alterar las clasificaciones de suelo ni otras determinaciones urbanísticas".

Sostiene el Consistorio, al hilo de esto, que el suelo de El Algarrobico era urbanizable en el PORN de 1994, que derogaba el ahora suspendido y al que el TSJA ordenó retrotraerse, un extremo muy controvertido ya que los cambios en la planimetría efectuados por la Junta de Andalucía fueron tachados por un juez como una "burda maniobra" e investigados por la Fiscalía, que ordenó el archivo.

Para la organización Greenpeace, según se recoge en su impugnación de 22 de julio al recurso de súplica, el Ayuntamiento de Carboneras interpreta con sus decisiones que la paralización cautelar del PORN es para poder urbanizar El Algarrobico y se acoge a que unos planos que "nunca fueron publicados en BOJA, y, por tanto, carecen de validez jurídica" lo señalan como urbanizable para interpretar así la decisión del TSJA, lo que, subrayan, "no es un acto de buena fe".

'El Juli' destacó en la 3ª de Feria / TOROS

ALMERÍA.- El diestro Julián López "El Juli" cortó una oreja de mucho peso hoy en Almería, aunque perdió un triunfo mayor por culpa de la espada.

"El Juli" realizó una faena de muy altas cotas a su primero, al que cuajó de principio a fin. Muy bien con el capote en las verónicas de recibo y posterior quite por chicuelinas. Y en el último tercio, labor impecable desde los ayudados por alto en el prólogo. Series a derechas de exquisito trazo, hondura y despaciosidad. Al natural, no bajó el interés.

Con el animal ya en la querencia, firmó "El Juli" un emotivo epílogo por circulares. Faena grande de dos orejas, que, sin embargo, quedó en una sólo por el pinchazo previo a la estocada final.

Al quinto, gazapón e incómodo, acabó imponiéndose "El Juli" a base de darle muchos tiempos para acabar pegándole pases de muy buen corte. Otra faena de inteligencia y paciencia del madrileño, pero que acabó diluyéndose con el estoque.

Manzanares pudo haber cortado una oreja de su primero si acierta a la primera con los aceros. El alicantino llevó a cabo una faena de empaque y cierto regusto, pero sólo por el lado derecho.

El sexto fue el más deslucido de todos. Toro que se paró a las primeras de cambio y que se negó en redondo a embestir. Manzanares insistió mucho para tratar de hacer ir y venir al animal, pero aquello no fue a ninguna parte.

Ponce tuvo en primer lugar un toro que manseó en el caballo y no quiso pelea en la muleta. El torero trató de afianzarlo en los medios con la mano derecha, pero al final se impuso la sosería del animal. Además falló a espadas.

El cuarto, muy justito de todo, tampoco fue oponente claro. Ponce lo intentó a base de sobar y sobar al animal, pero la faena no llegó a tomar vuelo. Y por si fuera poco se atascó en la suerte suprema.

FICHA DEL FESTEJO.- Toros de "El Ventorrillo", aceptablemente presentados, mansos y bajos de raza, que en general dieron poco juego a excepción de segundo y tercero.

Enrique Ponce, ovación y división al saludar.

Julián López "El Juli", oreja con petición de la segunda y ovación.

José María Manzanares, ovación tras aviso y silencio.

La plaza rozó el lleno en tarde calurosa.