domingo, 10 de marzo de 2024

España se ha convertido en el laboratorio europeo de la segunda transición demográfica

 


MADRID.- El año 2023 se cerró con 322.075 nacimientos. La cifra, aunque aún es provisional, supone un 24% menos de recién nacidos que hace 10 años y consolida a nuestro país en el furgón de cola de la fertilidad en Europa. Solo Malta está peor que nosotros, según  revela Xataka.

Y eso que, en fin, ningún país europeo supera los dos hijos por mujer en edad fértil. Si la población mundial ya ha empezado a contraerse como decíamos hace unas semanas, Europa (y muy especialmente España) es uno de los grandes laboratorios del 'decrecimiento demográfico'.

Aunque lo peor ni siquiera es eso, lo peor es que nadie sabe cómo evitarlo.

Muchas formas distintas de llegar a la misma situación. Porque aunque se suele decir que las especialmente bajas tasas españolas se deben a la falta de estabilidad laboral y a la edad de emancipación (algo que, todo sea dicho, seguramente sea cierto), el problema es general y sus tentáculos alcanzan a todos los países del mundo. Es decir, que estos vecinos están mejor, sí; pero solo un poco mejor.

Hacia un mundo vacío. Ya no es que, hoy por hoy, no haya ningún país del mundo con un régimen demográfico tradicional, ni siquiera que como defendía hace unas semanas el economista Jesús Fernández-Villaverde, por primera vez la Humanidad está por debajo de la tasa de reemplazo.

Es que, incluso en los países nórdicos (los campeones absolutos en políticas de conciliación y apoyo familiar), la natalidad se estaba derrumbando. "No es suficiente", señalaba la demógrafa finesa Anna Rotkirch en el Finantial Times y está claro que no lo es.

Todas las comunidades del mundo (con poquísimas excepciones -- cada vez más disputadas) tienen problemas para crecer.

Cómo vemos el mundo. Alberto del Rey, catedrático de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Salamanca, explicaba hace unos meses que, España es excepcional en muchos aspectos, pero que argumentos como "no tenemos hijos porque no podemos" no son ciertos del todo: "En España, se ha demostrado que algunas parejas de clase media con trabajos estables no tienen hijos porque tienen otras prioridades, y no pasa nada".

"Hoy en día disponemos de más recursos que en el pasado, no es la única  explicación. Hay un factor fundamental en las generaciones más recientes a partir de los 90 que es lo que se conoce como la famosa Segunda Transición Demográfica, que tiene que ver con que hoy en día priman más los aspectos relacionados con la autorrealización que antes", explicaba.

¿Segunda transición demográfica? Esta teoría parte de "que hay una flexibilización tan grande de las normas sociales tradicionales que los individuos priman sus intereses individuales, su curso de vida propio [...] Los ideales normativos  son cada vez menos rígidos y tienen una influencia menos evidente en los comportamientos sociales", explicaba Marta Séiz, investigadora en el Departamento de Sociología II de la UNED.

Esta explicación casa bien con la evidencia de que solo grupos como los amish, los judíos ortodoxos o los mormones han sido capaces de "escapar" de esa maldición de la baja natalidad. Y lo han hecho a costa de mantener esos ideales normativos en plena forma. Es más, los menos rígidos (mormones) tienen una natalidad más baja que los más estrictos (haredíes).

¿Se puede salir del laberinto? Es decir, ¿hay alguna manera de que la sociedad alcance tasas de reposición manteniendo ese cambio cultural de la "segunda transición"? Pues lo cierto es que no sabemos cómo. Solo sabemos que hay todo un mundo que se acaba y no sabemos cómo será el siguiente.

¿Son de fiar Planas y Ursula von der Leyen? / César Lumbreras *


Se dice pronto. Han tenido que pasar 37 días para que los responsables del Ministerio de Agricultura hayan remitido a las Consejerías de Agricultura un documento-propuesta con las medidas que están dispuestos a introducir, por ejemplo, en el Plan Estratégico de la PAC que impuso Luis Planas. 

Repito: 37 días que son los que van desde el 30 de enero, primera jornada de movilizaciones en Zamora, hasta el 6 de marzo, que es la fecha del citado papel. En el caso de las tres organizaciones agrarias reconocidas (ASAJA, COAG y UPA) es verdad que ha habido alguna reunión y que, en ella, Luis Planas y los miembros de su equipo han leído lo que estaban dispuestos a hacer, pero sin entregar un solo papel.

Eso a fecha de hoy, cuando ya se cumplen 40 días de la citada primera protesta. Esa es la forma que tiene Planas de negociar y su manera de entender un sistema democrático. Mientras tanto, durante estas últimas jornadas han continuado las movilizaciones. Esta es la foto fija de la situación. 

A pesar de ello, hay organizaciones agrarias que valoran como positivas algunas de las medidas presentadas de palabra, que no por escrito, por Planas. Debe ser que, tras la experiencia de estos casi seis años que Planas lleva al frente del Ministerio de Agricultura, todavía se fían de la palabra del ministro. Pues allá ellas.

Y, hablando de fiarse, ¿se puede fiar el campo europeo de las promesas hechas por Ursula von der Leyen? Me explico: durante los cuatro años y medio que lleva al frente de la Comisión Europea, hemos conocido a “dos Ursulas”. La primera, la que junto a su vicepresidente Timmermans puso en marcha el Pacto Verde europeo y todas las medidas incluidas en la nueva PAC, que son uno de los principales motivos de protesta de los agricultores y ganaderos; la segunda es la Ursula que en los últimos meses ha decidido dar una cierta marcha atrás en algunas de esas medidas verdes. 

Llegados a este punto, hay que hacerse la siguiente pregunta: ¿con cuál de las “dos Ursulas” nos quedamos? La respuesta es importante, porque von der Leyen ha sido designada esta semana por el Partido Popular Europeo (PPE) como su candidata a presidir la Comisión Europea a partir del 1 de noviembre de este año. Insisto: ¿es de fiar Ursula, la candidata del PPE, partido que se presenta como defensor del sector agrario y del medio rural europeo? Ahí lo dejo por ahora.

Y destaco un detalle que se olvida con frecuencia: el actual comisario de agricultura europeo, un polaco de apellido impronunciable, que, digo yo, habrá tenido algo que ver en la actual PAC, pertenece al mismo grupo político que Vox, que también dice defender al campo español, en el Parlamento Europeo. ¿Cómo se come eso?

Por último, esta semana hemos conocido un dato muy simbólico, que refleja la tendencia hacia la que va el sector agrario español: el número de explotaciones ganaderas que entrega leche de vaca a las industrias ha bajado por primera vez de las 10.000

A pesar de ello, de que haya menos ganaderos, la producción de leche de vaca en España ha aumentado. Ya ha pasado en otros sectores como el porcino o el de las frutas y hortalizas y es imparable: habrá menos explotaciones, pero más grandes.

 

(*) Periodista agropecuario