MADRID.- Más de 7,7 millones de andaluces, el 92 por
ciento de la población, respiran aire que supera los índices de
protección a la salud recomendados por la Organización Mundial de la
Salud (OMS), según el Informe Calidad Aire en España 2012 presentado
este martes por Ecologistas en Acción.
Si se tienen en cuenta los valores límites establecidos por la
Directiva 2008/50/CE, un 36 por ciento de la población española, 17,1
millones de personas, respira aire contaminado, pero atendiendo a los
valores recomendados por la OMS el porcentaje se dispara hasta el 93 por
ciento, más de 43,8 millones de personas, similar al que se registra en
Andalucía.
En Andalucía los contaminantes que más incidencia tuvieron en 2012
fueron el ozono troposférico, las partículas en suspensión PM10 y PM2,5
y el dióxido de nitrógeno.
El ozono troposférico afectó a todo el territorio andaluz, con
casi todas las estaciones de la red de medición registrando superaciones
muy elevadas del valor límite recomendado por la OMS.
En partículas PM10 y PM2,5 prácticamente todas las estaciones de
la red de medición sobrepasaron los valores límites recomendados por la
OMS para ambos contaminantes. Los territorios donde se alcanzaron los
peores registros fueron las áreas metropolitanas de Sevilla y Granada,
Málaga y la Costa del Sol y las áreas industriales de Algeciras y
Bailén.
El dióxido de nitrógeno tuvo sus peores registros en el área
metropolitana de Granada y también en la de Sevilla, como consecuencia
del intenso tráfico rodado que soporta.
El dióxido de azufre afectó principalmente a los territorios que
soportan una intensa actividad de tipo industrial. Así, las zonas en las
que hubo más superaciones del máximo valor diario que la OMS recomienda
no nunca, fueron la zona industrial de la Bahía de Algeciras y de
Huelva.
El informe de la organización ecologista, basado en los datos que
facilitan las administraciones autonómicas a partir de sus redes de
medición de la contaminación, señala que los niveles de contaminación
son "un poco más reducidos" que los de años precedentes, pero siguen
estando por encima de los valores legales establecidos por la Directiva,
y con mucha más frecuencia por encima de los valores recomendados por
la OMS.
Además, apuntan que esa reducción no se debe a que haya habido
actuaciones correctivas de las administraciones sino por la combinación
de una meteorología más inestable, que favorece la dispersión de
contaminantes, y la crisis económica, que ha provocado un menor uso de
los automóviles y una reducción del consumo eléctrico, lo que ha
posibilitado menores emisiones contaminantes de las centrales térmicas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario