miércoles, 28 de marzo de 2012

Tendremos una Semana Santa pasada por agua

MADRID.- Las lluvias y tormentas afectarán este jueves y viernes al cuadrante suroeste peninsular y se desplazarán a lo largo de los siguientes días aunque la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) espera que la inestabilidad descienda el Domingo de Ramos en la región, dejando intervalos de cielos nubosos pero únicamente lluvias débiles en la Andalucía Occidental y la mitad occidental de la provincia de Málaga.

   De cara a los próximos días en la parte más occidental de la región el jueves predominarán las nubes medias y altas en general, acompañadas de nubes bajas en el litoral, donde son probables los chubascos débiles o moderados, especialmente en las proximidades del Estrecho. El viernes y el sábado los intervalos de nubes medias y bajas serán frecuentes en toda la zona, pudiendo ir acompañados de chubascos débiles a moderados, e incluso de tormentas, y siendo más probables en las horas centrales del día.
   Sin embargo, el domingo tiende a disminuir un poco la inestabilidad, aunque se conservaran los intervalos de nubes medias y bajas, con riesgo de chubascos débiles en las horas centrales.
   Lo mismo se prevé que ocurra en las provincias más orientales, donde si bien el viernes y el sábado existe la posibilidad de que se produzcan chubascos débiles, de cara al Domingo de Ramos las posibilidades de lluvias quedan reducidas a la mitad occidental de Málaga.
   De cara al resto de la Semana Santa, por el momento, de acuerdo a los datos facilitados por la Aemet, se prevé una situación inestable, favorable a los intervalos nubosos con riesgo de chubascos débiles o moderados en toda Andalucía. Aunque con la advertencia de que las probabilidades de lluvia podrían disminuir al final del periodo en Málaga, Almería, Granada y Jaén.
   En el conjunto del país, el portavoz de la Aemet, Fermín Elizaga, ha explicado este miércoles a Europa Press que "el escenario más probable" de inestabilidad se va confirmando y que desde este jueves una borrasca se situará al suroeste de la Península y provocará un incremento de inestabilidad que se irá extendiendo al resto de España en los días venideros.
   Por ello, ha indicado que este jueves y viernes la nubosidad será "más importante" en el cuadrante suroeste, pero que a partir de ahí irá extendiéndose progresivamente a lo largo de los días hacia el interior peninsular, Ceuta y Melilla, dejando chubascos generalmente débiles que podrían producirse "casi en cualquier punto de España" entre el lunes y el jueves santo y, además, "casi a cualquier hora del día o de la noche".
   La Aemet ha puesto en funcionamiento un sistema para suministrar información a hermandades y cofradías, pendientes estos días del cielo y de las precipitaciones de cara a sus procesiones, y que incluye el envío, a través de correo electrónico y fax, de boletines especiales y diarios.
   Asimismo, a las hermandades y cofradías que lo soliciten se les enviarán por mensaje de texto otros boletines con predicciones de probabilidad de lluvia por intervalos horarios y localidades así como cambios significativos que aprecien llegada inminente de lluvia si ésta no hubiera sido advertida en las alertas más genéricas.
   Tras varios meses de sequía meteorológica, podría dar la impresión de que con la llegada de la Semana Santa llegan las lluvias, que ya afectaron durante ese mismo periodo a casi todo el país durante 2011.
   A este respecto, Elizaga ha explicado que, desde el punto de vista meteorológico "no hay razón", pero que las lluvias en esta época son "bastante explicables" puesto que en primavera, y sobre todo al principio de la estación el tiempo, suele ser "muy cambiante y la dinámica atmosférica está en transición", entre un invierno que es más estable y una primavera y verano, más inestables.
   De este modo, ha reconocido que esta inestabilidad provoca también problemas a los predictores meteorológicos, que tienen más dificultades, porque la predictibilidad suele ser menor. "En la época de Semana Santa se produce una mayor variabilidad y menor predictibilidad", ha concluido.

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