SEVILLA.- Andalucía perderá 9.282 empleos y su riqueza se mermará en un 0,23% con carácter anual, como consecuencia de la aplicación de los aranceles de un 15% que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha establecido para los productos procedentes de la Unión Europea, sin reciprocidad por parte europea, y que acordó hace poco más de una semana con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Layen.
El Gobierno andaluz ha mostrado este lunes los efectos que tendrán en la economía regional esos aranceles, según la información que la consejera de Economía, Hacienda y Fondos Europeos, Carolina España, ha difundido en esta jornada tras la reunión del Consejo de Gobierno, que se ha celebrado su última reunión del curso político antes del paréntesis que imponen las vacaciones de agosto.
«Se ha estimado que el PIB de Andalucía se vería reducido en 0,23 puntos porcentuales, lo que se traduce en 509 millones de euros», ha afirmado España, quien seguidamente ha indicado que la repercusión en el empleo sería la pérdida de 9.282 ocupados, cifra que en términos relativos ha cifrado en una reducción del 0,26%.
Ha recordado que el volumen de las exportaciones andaluzas a Estados Unidos es 3.138 millones, el 1,4% de la riqueza regional, mientras que en el caso de España, las ventas son de 18.179 millones de euros, el 1,1% del PIB nacional. En el caso de la UE ha hablado de un volumen de ventas superior al medio billón de euros, 532.000 millones, el 3% del PIB.
España, que ha recordado que los aranceles entran en vigor este jueves, día 7, ha sostenido que la repercusión de este gravamen comercial será menor tanto para Andalucía como para España en comparación con el conjunto de la Unión Europea.
«Esta estimación se han elaborado con dos tipos de efectos», ha precisado España, quien ha hablado de «unos efectos directos», en alusión a la reducción de las exportaciones, y en ese caso ha hablado de una reducción del PIB de Andalucía de un 0,13% en función de la relevancia de las exportaciones sobre la riqueza andaluza, así como sobre el crecimiento económico en general, donde ha hablado de una ralentización del 0,1% de la economía andaluza.
La consejera y portavoz, quien ha explicado que los cálculos se han hecho sobre las estimaciones de la Comisión Europea para la Unión Europea y de la fundación Funcas, ha precisado que esa estimación se hizo cuando la previsión es que los aranceles fueran de un 20%.
La también portavoz del Gobierno ha evocado la primera reacción del presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, acerca de que «el acuerdo no nos gusta, los aranceles nos parecen excesivos», para sostener que «siempre es mejor un mal acuerdo que una guerra comercial».
«Es un informe inicial que habrá que ir corroborando», ha proclamado la consejera de Economía, quien ha apelado a esperar a «ir comprobando una vez que ya entren los aranceles en vigor el próximo 7 de agosto».
Tras el dibujo económico, España ha sostenido que el Gobierno andaluz «estaremos en todo momento al lado de los exportadores, las empresas, los trabajadores» y por ello ha anunciado que «seguiremos trabajando junto a los sectores afectados» a la vuelta de agosto.
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