ALMERÍA.- “Usero tiene el enemigo en casa” comenta uno los socialistas que participó en la Asamblea que tuvo lugar el martes en la que se debía ratificar la lista que presentaba el candidato Juan Carlos Usero para las elecciones municipales, según Noticias de Almería.
El motivo de esta afirmación era que algunos miembros de la candidatura se habían permitido votar en contra, y uno de los menos recatadas en que se viera el sentido de su papeleta fue Joaquín Jiménez, quien figura como número tres de la misma.
El motivo de esta afirmación era que algunos miembros de la candidatura se habían permitido votar en contra, y uno de los menos recatadas en que se viera el sentido de su papeleta fue Joaquín Jiménez, quien figura como número tres de la misma.
Junto a él también votó en contra Pilar Navarro, parlamentaria andaluza que no va en la lista, pero que coincide con el anterior en que ambos fueron del equipo de Martín Soler cuando éste se presentó como candidato a la Alcaldía, y por tanto compartieron grupo municipal durante cuatro años. Transcurrido ese periodo, Soler, por aquel entonces secretario general del PSOE almeriense, colocó a uno al frente de la empresa pública de la Junta de Andalucía Egmasa, y a la otra en el Parlamento Andaluz.
Entrevistado por Antonio Felipe Rubio en La Mañana de la Cope, Jiménez ha negado tajantemente esta posibilidad, y lo ha calificado de "majadería". Jiménez ha retado a que se demuestre con alguna foto que eso fue así, y ha atribuido la información a quienes le ven en el entorno de la Ejecutiva provincial. El número tres de la lista asegura estar dispuesto a trabajar todo lo que haga falta por el proyecto socialista.
Fueron más miembros de la candidatura los que no la apoyaron, ya que el denominado sector crítico tenía como consigna abstenerse en las votaciones por no haber sido consultados ni informados de la la elaboración de la lista, y si eso se cumplió, “resulta imposible acumular tanto voto en contra”. Comentan además que los mencionados fueron quienes no ocultaron el voto, pero eran algunos más los que decían haberlo hecho.
Por el momento, y según coinciden todos los socialistas consultados, no es probable que vayan a impugnar la polémica asamblea, a pesar de detectar al menos dos irregularidades importantes. Una de ellas consistiría en que la mesa de votación estaba presidida por una persona que iba en la candidatura y eso no es estatutario, como también es antiestatutario que en la segunda vuelta voten menos de los 3/5 de los que lo han hecho en la primera.
Entrevistado por Antonio Felipe Rubio en La Mañana de la Cope, Jiménez ha negado tajantemente esta posibilidad, y lo ha calificado de "majadería". Jiménez ha retado a que se demuestre con alguna foto que eso fue así, y ha atribuido la información a quienes le ven en el entorno de la Ejecutiva provincial. El número tres de la lista asegura estar dispuesto a trabajar todo lo que haga falta por el proyecto socialista.
Fueron más miembros de la candidatura los que no la apoyaron, ya que el denominado sector crítico tenía como consigna abstenerse en las votaciones por no haber sido consultados ni informados de la la elaboración de la lista, y si eso se cumplió, “resulta imposible acumular tanto voto en contra”. Comentan además que los mencionados fueron quienes no ocultaron el voto, pero eran algunos más los que decían haberlo hecho.
Por el momento, y según coinciden todos los socialistas consultados, no es probable que vayan a impugnar la polémica asamblea, a pesar de detectar al menos dos irregularidades importantes. Una de ellas consistiría en que la mesa de votación estaba presidida por una persona que iba en la candidatura y eso no es estatutario, como también es antiestatutario que en la segunda vuelta voten menos de los 3/5 de los que lo han hecho en la primera.
En este segundo caso, sólo podrían hacerlo aquellos que se quedaron a la segunda ronda, pero que por el resultado de la misma, serían el sector que se agrupa entorno a la Ejecutiva Provincial que preside Soler, quienes no están de momento dispuestos a hacerlo ya que el objetivo lo tienen cumplido.
Señalan estas fuentes que una impugnación sólo perjudicaría más a la imagen pública del partido, y que “lo que debería hacer Usero es dimitir”, ya que de los 1.300 militantes que tiene el PSOE de la capital, al final el candidato y su lista sólo es respaldada por 44 votos.
Señalan estas fuentes que una impugnación sólo perjudicaría más a la imagen pública del partido, y que “lo que debería hacer Usero es dimitir”, ya que de los 1.300 militantes que tiene el PSOE de la capital, al final el candidato y su lista sólo es respaldada por 44 votos.
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