lunes, 11 de noviembre de 2019

El inicio de curso plantea problemas con comedores o falta de profesorado

ALMERÍA.- Comienzo de curso, problemas de siempre y otros tantos nuevos. La Federación de Asociaciones de Madres y Padres del Alumnado de Centros de Educación Pública de Almería (FAPACE) ha realizado una encuesta a través de los distintos colegios de la provincia para analizar las dificultades con las que se han encontrado los alumnos en este inicio de curso; y si los problemas existían en el pasado, siguen estando presentes de la misma forma en este curso escolar que acaba que arrancar. 

Una de las primeras críticas que desde FAPACE realizan tiene que ver con el ratio de alumnos de los colegios del Poniente. Piden una atención más responsable para sus hijos. Y es que, según la última encuesta realizada por el sindicato CSIF, los ratios del Poniente almeriense están por encima de los 28 alumnos en Primaria (el límite está en 25) y los 34 y 35 en caso de Secundaria y Bachillerato, que tienen un límite de 30 alumnos por clase. 
Desde FAPACE ponen también en la lupa los 800 millones de euros que la Junta de Andalucía ha estimado para infraestructuras, ya que estos son solo para obras e máxima urgencia y según FAPACE “van con retraso”. Aseguran que hay que arreglar pistas deportivas, techos, baños o ventanas. 
Además critican la falta de gimnasios y que están perdiendo los salones de actos para hacer más aulas, “incluso siguen existiendo aulas prefabricadas”. FAPACE pone sobre la mesa que algunos centros no cuentan ni con salida de emergencia.
En cuanto al transporte escolar, desde la Federación sostienen que el transporte escolar está reduciendo paradas y servicios. Critican irregularidad en el servicio, llegadas tarde o demasiado temprano, “sin acompañamiento una vez que llegan al centro”. Por ejemplo, especifican que en Roquetas, la ley no permite dentro del casco urbano pero a veces son más de tres kilómetros.
De los comedores escolares también sacan defectos, como “calidad insuficiente y poco apetecible. Hay dinero que se tira en comida en la basura y el alumnado se queda con hambre”. Alegan, además, que se ha perdido el espacio socializador y educativo del comedor, asegurando además que existe en la actualidad una amplia lista de espera por falta de plazas.

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