viernes, 18 de mayo de 2012

Moody's deja a Cajamar hecha unos zorros al situarla a nivel del bono-basura

MADRID.- Moody's confirmó a última hora de ayer la rebaja de entre uno y tres escalones de la calificación de 16 entidades financieras españolas: BBVA, Banesto, Banco Santander, Santander UK, Unicaja, Caixa Bank, Banco Popular, Caja Rural de Navarra, Banco Sabadell, Banco Cooperativo Español, Bankinter, CECA, Caja Rural de Granada, Liberbank, Cajamar Caja Rural y Lico Leasing. La agencia rebaja a Liberbank, Cajamar y Lico Leasing a la categoría de bono basura, las peores calificadas del país.

La agencia justifica esta reducción de la nota por las "adversas condiciones" en las que operan los bancos, la menor solvencia crediticia del país, el "rápido" deterioro de la calidad de los activos y las "restricciones" en el acceso a los mercados de capitales.
Moody's hace referencia a la recesión de la economía española, la actual crisis del mercado inmobiliario y el "persistente" alto nivel de desempleo, así como los problemas de acceso a crédito que dificultan al Gobierno respaldar a la banca. Añade que existe un "persistente temor" entre los inversores y esto puede un impacto en la banca española y su deuda soberana.
Los otros bancos afectados son Banesto, Unicaja, Caixa Bank, Caja Rural de Navarra, Popular, Banco Sabadell, Banco Cooperativo Español, Bankinter, Confederación Española de Cajas de Ahorro (CECA) y Caja Rural de Granada.
Según cálculos de analistas, esta degradación junto a la de Standard and Poor's del pasado mes podría obligar a las entidades a reponer 80.000 millones de euros en avales ante el BCE para financiarse.
El supervisor comunitario se basa en las notas que otorgan las agencias para fijar el volumen de garantías (colateral) que los bancos deben depositar en Fráncfort para poder financiarse con el dinero del BCE. Así las cosas, cuanto menor es ese «rating» mayores serán los avales exigidos.
Como fuere, el movimiento de Moody's ayer pudo sorprender por su contundencia, pero no se puede decir que resultara imprevisible. La propia agencia anticipó por la mañana que ejecutaría una reducción de «rating» masiva. Después justificaba su ataque en las condiciones adversas de la economía española, de nuevo en recesión, la menor solvencia de la deuda soberana, el «rápido» deterioro de la calidad de los activos de estas entidades y la menor capacidad de estas empresas para financiarse en el mercado. Sin embargo, la agencia también menciona algunas «tendencias positivas» dentro del escenario financiero español y cita como ejemplos el aumento de las provisiones de bancos y cajas, el aporte de liquidez por parte del BCE y las medidas de apoyo, actuales y futuras, del Gobierno Rajoy.
En todo caso, la rebaja responde también a que las agencias no suelen dejar a ningún banco con un nota superior a la de su país. Así, el castigo de ayer sigue la estela del recorte hecho al bono del España el pasado mes de febrero, cuando Moody's rebajó en dos escalones el nivel de solvencia del país, a de «A1» a «A3».

No hay comentarios:

Publicar un comentario