MADRID.- El Gobierno español considera la posibilidad de una acción legal contra las autoridades de Hamburgo por haber acusado a los pepinos españoles de ser el posible origen de una epidemia mortal por la bacteria E.coli en el norte de Alemania.
Las autoridades sanitarias de la ciudad de Hamburgo admitieron el martes que los análisis parciales realizados descartaban por el momento a los productos españoles como fuente de la propagación de una cepa mortal de la bacteria E.coli enterohemorrágica en el norte de Alemania.
"La bacteria no está en España", afirmó este miércoles en la radio Cadena Ser, el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba.
"Una vez que se restablece la verdad lo que queda es resarcir los daños que no son pocos, se ha perdido mucho dinero y mucha imagen", añadió.
Los productores de frutas y hortalizas españoles alertaron el martes de la caída de las ventas debido a la psicosis que se ha propagado por la Unión Europea respecto a las hortalizas españolas.
La Federación Española de Productores-Exportadores de frutas y hortalizas (Fepex) evaluó las pérdidas en torno a los 200 millones de euros por semana.
"No descartamos acciones contra las autoridades que han puesto en tela de juicio la calidad de nuestros productos y por tanto se puede emprender acciones contra las autoridades, en este caso de Hamburgo", añadió Rubalcaba.
"Hemos pedido a la Unión Europea que levante la alerta" sanitaria decretada el jueves al respecto, afirmó más tarde, durante una rueda de prensa en Almería (Andalucía, sur).
"Todos los análisis que hemos hecho, nos falta uno, en cuanto lo tengamos, o la ministra de agricultura o la ministra de sanidad comparecerá para decir que todo está perfectamente bien", dijo, insistiendo en que "hasta ahora todos (los pepinos analizados, ndlr) están perfectamente limpios".
Los resultados oficiales de los análisis sobre los pepinos y la tierra tomados en los terrenos de dos productores de Andalucía (sur) apuntados por Alemania, que se llevan a cabo en un laboratorio español, todavía no han sido oficialmente comunicados.
Los profesionales del sector en España "están planteando reclamaciones" por los perjuicios, según Rubalcaba: "Es evidente que se ha puesto en riesgo el trabajo de mucha gente sin pruebas, y eso me parece que es una actitud arriesgada" cuando "los productos españoles no tienen nada que ver con esta crisis".
"Ciertamente estamos al final del camino, pero hemos pasado unos días muy malos", reconoció.
La ministra de Agricultura española, Rosa Aguilar, pidió el martes en el marco de una reunión con sus colegas europeos en Hungría la aplicación de "medidas extraordinarias de apoyo a los productores", según un comunicado de su ministerio.
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