ALMERÍA.- El socialista almeriense Martín Soler no siguió como consejero de Innovación, Ciencia y Empresa cuando el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán renovó el consejo de gobierno tras ser elegido secretario general del PSOE-A, y a continuación él presentó su dimisión como presidente del consejo de administración del Parque Científico-Tecnológico de Almería (PITA, aunque el acrónimo ya no coincida con las siglas).
En aquel momento, Soler argumentó su dimisión por escrito al considerar que debía ser el consejero de Economía, Innovación y Ciencia, Antonio Avila quien ocupara el puesto, lo que efectivamente se produjo el 14 de junio de 2010, sólo cuatro días después de que cesara su antecesor.
Lo cierto es que todas aquellas decisiones no han tenido reflejo en el Registro Mercantil hasta diez meses después. Según ha constatado Noticias de Almería, ha sido el 15 de abril de 2011 cuando se ha hecho efectiva la anotación correspondiente en este documento oficial, a pesar de que se han producido varias reuniones del consejo de administración desde aquella fecha.
Tambien desde este momento cambia la sede social, pero no al Parque cuya urbanización ya fue inaugurada por el presidente de Andalucía José Antonio Griñán, si no al edificio construido en el campus universitario de La Cañada.
La presidencia del PITA siempre ha tenido un devenir extraño, ya que oficialmente quien ejercer el cargo según el Registro Mercantil es SOPREA, una empresa pública de la Junta de Andalucía dependiente de la Agencia Idea, que a su vez está vinculada a la Consejería de Economía, Innovación y Ciencia. Y es sorprendente por que quien cesa en el cargo es un consejero como persona física, Soler, pero quien le sustituye es una empresa, a pesar de que públicamente se diga que es el consejero Ávila, lo que se ha sabido a raíz de esta inscripción en el Registro Mercatil efectuada como señalábamos con diez meses de retraso.
El PITA estuvo presidido por Clemente García, Delegado de Empleo y Desarrollo Tecnológico de la Junta de Andalucía, posteriormente por el también delegado Javier de las Nieves, que sigue vinculado a él como consejero, y no fue hasta que Soler fue nombrado consejero de Agricultura cuando pasa a tener como máximo responsable a un consejero del Gobierno andaluz. Cuando le cambian de esta Consejería a la de Innovación, Ciencia, Empresa y Universidad, se “lleva” con él la presidencia de PITA, que se adscribe a ésta.
Por último, hay que recordar que es el propio Soler quien deja por escrito cuando dimite, quién debe ser su sucesor al frente de esta sociedad anónima.
En aquel momento, Soler argumentó su dimisión por escrito al considerar que debía ser el consejero de Economía, Innovación y Ciencia, Antonio Avila quien ocupara el puesto, lo que efectivamente se produjo el 14 de junio de 2010, sólo cuatro días después de que cesara su antecesor.
Lo cierto es que todas aquellas decisiones no han tenido reflejo en el Registro Mercantil hasta diez meses después. Según ha constatado Noticias de Almería, ha sido el 15 de abril de 2011 cuando se ha hecho efectiva la anotación correspondiente en este documento oficial, a pesar de que se han producido varias reuniones del consejo de administración desde aquella fecha.
Tambien desde este momento cambia la sede social, pero no al Parque cuya urbanización ya fue inaugurada por el presidente de Andalucía José Antonio Griñán, si no al edificio construido en el campus universitario de La Cañada.
La presidencia del PITA siempre ha tenido un devenir extraño, ya que oficialmente quien ejercer el cargo según el Registro Mercantil es SOPREA, una empresa pública de la Junta de Andalucía dependiente de la Agencia Idea, que a su vez está vinculada a la Consejería de Economía, Innovación y Ciencia. Y es sorprendente por que quien cesa en el cargo es un consejero como persona física, Soler, pero quien le sustituye es una empresa, a pesar de que públicamente se diga que es el consejero Ávila, lo que se ha sabido a raíz de esta inscripción en el Registro Mercatil efectuada como señalábamos con diez meses de retraso.
El PITA estuvo presidido por Clemente García, Delegado de Empleo y Desarrollo Tecnológico de la Junta de Andalucía, posteriormente por el también delegado Javier de las Nieves, que sigue vinculado a él como consejero, y no fue hasta que Soler fue nombrado consejero de Agricultura cuando pasa a tener como máximo responsable a un consejero del Gobierno andaluz. Cuando le cambian de esta Consejería a la de Innovación, Ciencia, Empresa y Universidad, se “lleva” con él la presidencia de PITA, que se adscribe a ésta.
Por último, hay que recordar que es el propio Soler quien deja por escrito cuando dimite, quién debe ser su sucesor al frente de esta sociedad anónima.
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