LONDRES.- España ha emprendido "una drástica limpia de cajas de ahorros" para ganar la confianza de los mercados y luchar contra la crisis europea de deuda soberana, ahora centrada en Portugal, según publica 'The Telegraph', que califica las medidas adoptadas por el Gobierno de "draconianas".
Las entidades más débiles, "o cajas de ahorros" deben elevar su core capital al 10% antes de septiembre si su financiación depende en un 20% de los mercados mayoristas y no cuentan con presencia de inversores privados en al menos una quinta parte de su accionariado, recuerda el rotativo.
Los requisitos son aún más duros que los planes dados a conocer a grandes rasgos el mes pasado y "ponen de manifiesto la determinación de las autoridades de terminar con los cánceres para evitar el tipo de corriente que llenó de problemas a Japón en la década de los 90", estima.
El rotativo subraya que las medidas del Gobierno llegan después de que el diferencial del bono portugués a diez años respecto al bono alemán, de referencia, escalase hasta un máximo del 7,66%, renovando los temores de un contagio a España.
Aunque el Banco Central Europeo (BCE) interviniese este jueves para restaurar la calma "está claro que la euforia europea" respecto a la compra de deuda portuguesa por parte de China "no ha durado mucho".
El secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa, y "el arquitecto de la puesta a punto de las cajas ve improbable que las cajas más vulnerables encuentren inversores privados", sostiene 'The Telegraph'.
El diario recalca que "solo cinco de las 17 cajas alcanzan la exigencia del 10%", ya que "NovaCaixaGalicia tiene un 6%, Unnim un 6,2%, y CatalunyaCaixa un 6,6%". Además agrega que, "incluso el gigante de Caja Madrid tiene un core capital del 7,1%, aunque está preparando su salida a bolsa".
Aunque el Consejo de Estabilidad Financiera (FSB, por sus siglas en inglés) alabara recientemente los esfuerzos llevados a cabo por España para reforzar su sistema financiero, el organismo dependiente del G-20 agregó que dichas acciones se hicieron necesarias en parte por el retraso en la reconducción de las debilidades estructurales de las cajas, recoge 'The Telegraph'.
Según el diario, José Manuel Campa culpa de la renovada erupción de la crisis de deuda soberana europea a las conversaciones franco alemanas respecto a la posibilidad de que los tenedores de deuda soberana tengan que asumir una quita.
"Eso realmente no hizo daño. Tuvimos que hacer grandes esfuerzos para ser transparentes, pero la crisis irlandesa devaluó la calidad de los test para todos", recalcó el secretario de Economía, según recoge el diario.
El destino de las cajas de ahorros es inseparable del mercado inmobiliario español, donde las burbujas de precios se centraron en los suburbios de Madrid y en partes de la costa más turística, mientras que el resto del mercado está más cerca del equilibrio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario