martes, 2 de febrero de 2010

Trabajadores de las subcontratas de Elsur levantan la acampada después tres horas de protesta

ALMERÍA.- Los 87 trabajadores de las empresas Jardines del Alcor, Jardines del Poniente y Lobelia Gestión, todas ellas propiedad del empresario Juan Antonio Galán, en prisión incondicional a raíz de la operación 'Poniente' en El Ejido, finalizaron hoy el acto de protesta por sus sueldos tres horas después de haber iniciado la concentración e iniciar una acampada de carácter "indefinido".

Fuentes sindicales señalaron que, si bien durante todo el acto los protestantes estuvieron vigilados por varios agentes de Policía Nacional y Policía Local de Almería, fueron los propios trabajadores quienes decidieron poner fin al acto, por motivos que no especificaron, de manera que abandonaron el lugar de la concentración hacia las 15,00 horas.

Durante los 180 minutos en los que permanecieron en la capital, los trabajadores repartieron más de 500 copias de octavillas entre la población en las que ofrecen su versión sobre el impago de sus nóminas, una cantidad acumulada de 336.000 euros, los trabajadores desenfundaron a las 13,00 horas varias tiendas de campaña con el propósito de permanecer en el lugar a modo de protesta.

De esta forma, tanto los propios empleados de jardinería de El Ejido como sus representantes sindicales criticaron la actitud de los empresarios, a los que reprocharon que "no son capaces de juntar 112.000 euros para 87 familias pero sí para fianzas" de aquellos imputados en la operación 'Poniente' puestos en libertad.

Asimismo, también hicieron referencia a una posible "reducción de plantilla" que, según ellos, desde la dirección de la empresa se pretende llevar a cabo mientras que la petición de los empleados consiste en integrar a todos los trabajadores municipales --426 en total-- en la misma entidad.

"Estamos ya en el cuarto mes sin cobrar, algo dramático", exclamaron algunos de los manifestantes, quienes pusieron de relieve la situación en la que se encuentra el municipio ejidense, pues, según afirmaron, "el pueblo está cada vez más sucio y a los políticos no les importa".

Para los trabajadores de jardinería de El Ejido, el Ayuntamiento (PAL) está "totalmente destruido y nosotros somos los que estamos pagando el pato de este caos", por lo que instaron a los políticos de las distintas administraciones a que "hagan un esfuerzo" para solucionar su situación.

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