ALMERÍA.- La alcaldesa de Almería, María del Mar Vázquez (PP), ha asegurado este lunes que el Consistorio mantiene activa la búsqueda de terrenos con los que proponer a la Estación Experimental de Zonas Áridas (EEZA-CSIC) un traslado de la Finca Experimental que mantienen en La Hoya, junto a la Alcazaba, y poder sacar de allí los ejemplares de especies amenazadas de ungulados, principalmente gacelas, que se preservan "hacinadas", según ha dicho.
"Seguimos pensando, igual que pensaba hace meses, que no es el sitio idóneo para que estén esos animales hacinados, no solamente por las propias criaturas, sino porque limita el desarrollo cultural y patrimonial de la propia ciudad y de la provincia", ha manifestado la alcaldesa a preguntas de los medios.
La primer edil ha realizado estas consideraciones después de que el Ayuntamiento programara un ciclo de conciertos en el recién renovado mirador del Cerro de San Cristóbal, junto a la finca, y después lo trasladara a otro espacio para prevenir daños como los que se investigan por la muerte de cinco ejemplares en junio del año pasado coincidiendo con los conciertos de Alamar.
Vázquez ha recordado que desde el órgano científico se trasladaron determinadas "líneas o criterios" que debían reunir los suelos para poder desplazar la Finca Experimental de los terrenos, propiedad del CSIC, en los que se asientan actualmente.
"Hay algunos --suelos-- que entendemos que podemos darles sin problema, porque está circunscrito a la salud de las gacelas y de las criaturas que tienen ahí", ha dicho la alcaldesa en relación a esas propuestas sobre las que, según ha dicho, se trabaja aún.
Cabe recordar que el equipo de investigación del Seprona de la Guardia Civil avaló que la muerte de cuatro gacelas y un arruí de especies amenazadas --entre ellas una cría-- que tuvo lugar el pasado mes de junio coincidiendo con el ciclo musical de Alamar podría estar relacionada con el "estrés" inducido a los animales por los conciertos, lo que "jugó un papel crucial en la mortalidad" de los ejemplares.
El informe técnico-pericial de la Guardia Civil aportado a la causa que instruye el Juzgado de Instrucción número 2 de Almería respalda en sus conclusiones las necropsias que los veterinarios de la EEZA realizaron a los ungulados, de modo que las mismas revelaron "posibles muertes debido a traumatismos severos" que, en su caso, derivaron de episodios de fuerte estrés en las gacelas y arruís que se vieron expuestas al alto volumen de la música.
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