viernes, 17 de mayo de 2013

El Ayuntamiento de Níjar aprueba licitar el servicio de acceso y limpieza a las playas de Cabo de Gata


NÍJAR.- El Ayuntamiento de Níjar ha aprobado en junta de gobierno el pliego de condiciones para sacar a licitación pública la explotación del servicio de gestión, mantenimiento y limpieza de los accesos a las playas del Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar durante este verano, una oferta que saldrá publicada la próxima semana en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) por la que además se regulará el sistema de acceso a las playas del Parque. 

   Así lo ha indicado hoy el alcalde de Níjar, Antonio Jesús Rodríguez (PP), quien ha precisado que el pliego de cláusulas recoge que el adjudicatario, que deberá ingresar por la prestación del servicio un canon al Ayuntamiento que revertirá en obras de mejora en el Parque; se encargará tanto de la gestión de los aparcamientos, así como del servicio de transporte público, el mantenimiento del camino y, como novedad, la limpieza de las playas.
   El propio pliego recoge las cuantías que el adjudicatario podrá cobrar a los usuarios por la entrada con vehículo desde San José a las playas de Genoveses, Mónsul, Cala Carbón, Cala de Media Luna y la Cala de Enmedio, de forma que el precio por el uso de los aparcamientos regulados será de cinco euros, mientras que el acceso en autobús será de un euro por trayecto.
   La elección de la empresa adjudicataria está estimada para el 20 de junio, nueve días antes del inicio de la temporada enmarcada entre el 29 de junio y el 8 de septiembre según el anuncio publicado en BOJA por el que se autoriza el acceso regulado con vehículos a motor. Para este mismo periodo, Junta y Ayuntamiento han firmado un documento para conceder al Consistorio el uso de una finca ubicada en la playa de Mónsul, que sea destinada al estacionamiento de vehículos. El Consistorio ha rubricado un acuerdo de similar naturaleza con el grupo Playas y Cortijos para la gestión de otra zona frente a Los Genoveses.
   El delegado territorial de Medio Ambiente de la Junta en Almería, José Manuel Ortiz Bono, ha expresado en una nota que está "convencido" de que este verano "se mejorará la gestión municipal de los accesos a las playas", ya que "este 'parking', unido al aparcamiento privado de Los Genoveses, permitirá el cobro de ticket a los vehículos privados que estacionen en dichas zonas, lo que permitirá aplicar un descuento al precio del billete del transporte público.
   La habilitación de este espacio de aparcamiento con capacidad para 124 vehículos permitirá además la recuperación ambiental de otras zonas usadas como aparcamiento en los pasados años, en zonas de servidumbre de protección, junto a las calas de Mónsul y Media Luna, que fueron clausurados y restaurados en 2012 gracias a un proyecto de la Reserva de la Biosfera Cabo de Gata-Níjar.
   Las playas naturales situadas a poniente de la barriada de San José --entre Genoveses y Cala Carbón--, son una zona de alto valor ecológico y paisajístico y uno de los enclaves más privilegiados de la franja litoral mediterránea. A ellas se accede a través de un camino de unos seis kilómetros, sin pavimentar, que parte desde la barriada de San José y llega hasta el pie de los acantilados de la Vela Blanca.
   Este camino conduce a varias explanadas que son utilizadas desde hace tiempo como aparcamiento, desde San José, Genoveses, Mónsul, Media Luna y Cala Carbón. Además, en la zona de El Barronal --entre Mónsul y Genoveses-- existe un "anchurón" que también se viene utilizando como aparcamiento.
   Por sus características singulares, las zonas de playa reciben una afluencia continuada de visitantes que durante los meses estivales trae consigo la "masificación" de estos entornos, y de forma colateral supone "una ocupación excesiva de los espacios de aparcamiento y áreas colindantes asociadas a las playas".
   Aunque se carece de un estudio de detalle actualizado que cifre la capacidad de carga real, tanto de las playas como de las infraestructuras viarias asociadas, el deterioro de los ambientes y paisajes justifican la aplicación del precepto del Plan de Ordenación de los Recursos Naturales (PORN), que permite regular el tránsito en los caminos del Parque Natural, "en los sectores y épocas que considere oportunos, para la adecuada preservación de los recursos naturales", según se recoge en el Decreto de 2008.
   Esta aplicación del principio de precaución justifica la solución que se viene adoptando desde hace unos años: la implantación de un control de acceso en función de la saturación de estas zonas en los meses de verano, así como la habilitación de tres zonas de aparcamiento (Genoveses, Barronal y Mónsul) con capacidad para unos 300 vehículos.
   En base a un informe del Servicio de Protección Civil de la Delegación del Gobierno en Almería sobre aspectos relacionados con la seguridad de los vehículos y de las personas que estén en dichas zonas, se ha planificado un aforo total de unos 300 vehículos para satisfacer el uso público durante el periodo estival.
    Por todo ello, las soluciones se encaminan al diseño de un sistema de gestión integrada en el que sea una sola Administración a la que se encomiende el sistema, aunque implique la colaboración de otras, en este caso, el Ayuntamiento de Níjar y la Delegación Territorial de la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, así como de los propietarios de terrenos.
   Los efectos directos e indirectos del "excesivo tráfico" en los meses estivales afectan a los valores ambientales ya que, el propio camino, en sí mismo, produce una rotura del paisaje y la fragmentación de los hábitats. No obstante, el primer causante de estos efectos es el aumento "desproporcionado" del tráfico rodado, con la consiguiente "congestión y estacionamiento descontrolado" en arcenes de caminos y fuera de los aparcamientos habilitados al efecto, así como el "exceso de velocidad" de los vehículos, que a pesar de que existe limitación de velocidad a 30 kilómetros por hora, dicha limitación "no es respetada por buena parte de los usuarios".
   A esto hay que añadir el que las condiciones de seguridad vial y la actuación de los servicios en caso de emergencias "se ven dificultadas", por lo que la visita a estas playa se puede convertir en una experiencia "insatisfactoria, frustrante y en algunos casos peligrosa".

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