ALMERÍA.- La compañía eléctrica Endesa ha invertido a lo largo de este año cerca de 1,4 millones de euros en la digitalización de las infraestructuras eléctricas, reforzando las redes de media y baja tensión, en los barrios de la capital donde se ha detectado un mayor fraude energético y sobrecargas derivadas, en su mayor parte, de los enganches ilegales «masivos» procedentes de plantaciones de marihuana.
Según ha indicado la mercantil en una nota, estas inversiones, que se suman a los más de tres millones invertidos en los últimos tres años, se han llevado a cabo en las zonas de Pescadería, La Chanca, El Puche, Los Almendros, Piedras Redondas o El Quemadero, a fin de reforzar las redes eléctricas.
En estas zonas se ha «duplicado» la potencia y se han tendido once kilómetros de nuevo cableado de media y baja tensión a lo largo de este año, durante el cual además se ha aplicado la última tecnología automatizando ocho centros de transformación, lo que permite su control remoto y la obtención de datos para actuar de manera preventiva ante cualquier incidencia.
Con estas medidas, la filial de redes de Endesa, e-distribución, tiene una potencia instalada actualmente en estos barrios de 28,10 MWh, lo que supone casi un 300% la potencia contratada, de modo que estas zonas tienen «tres veces más potencia que la contratada, por lo que la capacidad de distribución debiera estar garantizada en condiciones de calidad suficientes».
Endesa ha explicado que «sigue participando en todas las mesas de trabajo activas para buscar soluciones conjuntas a este problema» y está «trabajando de forma directa con las fuerzas de seguridad» para detectar las plantaciones de marihuana que provocan las saturaciones de las redes.
En los últimos tres años se han llevado a cabo 158 operaciones masivas contra el fraude, desconectándose cerca de 10.000 suministros ilegales. Gracias a estas intervenciones la red eléctrica registra unos descensos de consumo de hasta un 60%, lo que se traduce en un funcionamiento normal de las instalaciones.
La mencionada filial ha llevado a cabo en la zona de Pescadería y La Chanca, donde se registra un nivel de fraude del 56%, una inversión que supera los 740.000 euros con la instalación de dos nuevos centros de transformación en la Plaza del Anzuelo y la Calle de Los Pescadores, y el refuerzo de cuatro kilómetros de cableado de media y baja tensión.
En El Puche, donde el fraude supera el 30%, la inversión ha superado los 270.000 euros con actuaciones en cinco kilómetros de cableado de baja y media tensión, la instalación de un nuevo centro de transformación y la ampliación de potencia de otros dos.
Además de aplicar la última tecnología en digitalización para poder actuar de forma rápida ante cualquier saturación de las redes provocada por los enganches ilegales.
En Los Almendros, Piedras Redondas, Quemadero, Fuentecica y San Cristóbal, donde la media de fraude es del 50%, se han invertido 375.000 euros con actuaciones en más de 7 kilómetros de cableado de baja y media tensión, ampliaciones de potencia y dos nuevos centros de transformación.
A pesar de este esfuerzo inversor que ha «duplicado y triplicado» la potencia eléctrica y aplicando la última tecnología, los cortes de suministro provocados por los enganches ilegales «se siguen produciendo» ya que las plantaciones de marihuana «requieren suministro eléctrico las 24 horas del día los 365 días del año» y «cada vez están proliferando más cultivos lo que satura las redes desencadenando situaciones de peligro para la población».
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