NUEVA YORK.- El
futuro del mercado laboral está en los "empleados digitales",
programados con Inteligencia Artificial (IA), que abrirán la puerta a
una semana laboral de solo tres jornadas, según los expertos
participantes en un encuentro sobre esta tecnología celebrado este
miércoles en Nueva York.
La
preocupación por el impacto que la automatización y las tareas
programables es un runrún habitual cuando se trata la IA, ya que sus
detractores aseguran que supondrá una mayor destrucción de empleo que
una creación de nuevas oportunidades laborales, algo discutido por los
participantes en la tercera edición del Encuentro de Empleados
Digitales.
Esta
cumbre, que reunió en Nueva York a lo más granado del mundo
tecnológico, estuvo auspiciada por la empresa IPSoft, líder en el
desarrollo de interfaces de IA como Amelia, un software conversacional
con "capacidades similares a las de los humanos" que funciona como un
agente de enlace entre las empresas y el cliente final, generalmente
para la resolución de dudas.
Sin
embargo, a diferencia de los "chatbots" habituales, Amelia cuenta con
una mayor capacitación contextual y flexibilidad que le permiten
conversar fluidamente con los consumidores sin que sean conscientes de
que la joven que responde sus dudas es un programa informático.
Para
el consejero delegado de IPSoft, Chetan Dube, Amelia no pone en peligro
el futuro del empleo, sino que supone un cambio en la cultura del
trabajo donde se tendrá que apostar por funciones más creativas en
detrimento de las rutinarias que serán ejecutadas por robots.
De
hecho, su software permite "entrevistar" a estos candidatos
computacionales para ofertas de trabajo, con 670 perfiles diferentes
para tantas habilidades como ofrecen estos empleados en sectores que
abarcan desde el bancario, los seguros o las telecomunicaciones.
"¿Cómo
empezamos a educar a las mentes más lúcidas de que deberíamos empezar a
hacer trabajos más creativos?", se pregunta Dube.
"¿No
deberían las máquinas trabajar para nosotros? Dejar que las máquinas
trabajen y que el hombre disponga de mayor libertad para dedicarse a lo
artístico", asevera el fundador de esta compañía en 1998.
Según
Dube, el empleo de la Inteligencia Artificial en estas tareas
rutinarias supondría un aumento del producto interior bruto mundial del
40 %, ya que trabajan veinticuatro horas, los siete días de la semana:
"Debemos pensar cómo redistribuir esa nueva riqueza. Eso me preocupa.
Debemos preguntarnos cómo evitar que quede en unas pocas manos".
En
este último asunto coincide el profesor de la Universidad de Stanford
(California), Christopher Manning, uno de los mayores expertos
académicos en el campo del aprendizaje para máquinas y la inteligencia
artificial.
"Hay
dos asuntos que deben preocuparnos: el primero es que la velocidad del
cambio se está acelerando y cada vez cuesta más a los humanos adaptarse a
este nuevo entorno. El segundo es redistribuir estos beneficios,
reinventar la manera en que funciona el mundo", reflexiona el docente de
Ciencia computacional.
Si
bien la preocupación es necesaria, afirma el académico, la inclusión de
la Inteligencia Artificial no va a suponer solo desventajas, sino que
podría suponer un nuevo entorno para las relaciones laborales.
"Creo
que la actitud es ver que la tecnología mejora la vida de la gente. Si
lo peor que puede pasar es que tengamos que ir hacia una jornada laboral
de tres días porque la mayor parte del trabajo estará automatizado, eso
no será algo malo, las vidas serían incluso mejores", explica el
profesor.
Para
ello, pone como ejemplo un desarrollo tecnológico que cambió por
completo toda una profesión: las hojas de cálculo, que ahorraron
muchísimo tiempo a los contables, tanto como para desarrollar nuevos
métodos que a su vez aumentaron el empleo en el sector.
El
encuentro incluyó las ponencias de representantes de empresas punteras
en innovación en este campo, como Telefónica, Bank of America, BNP
Paribas o Deloitte.
Telefónica,
por ejemplo, comenzó a implantar agentes digitales en su servicio de
atención al cliente en Perú y en ocho semanas ya han atendido 100.000
llamadas, aunque esperan que para finales de julio atiendan alrededor de
250.000 diarias, lo que fue expuesto como un caso de éxito en este
evento.
"Somos
muy humildes con esto, estamos aprendiendo mucho durante estos años",
afirmó ante la audiencia de la jornada el director global de centros de
contacto de la firma, Gonzalo Gómez Cid.
No hay comentarios:
Publicar un comentario