La EEZA-CSIC apunta una tasa de supervivencia del 80% de sus gacelas en cautividad en los últimos cinco años

 ALMERÍA.- Las distintas especies de gacelas pertenecientes a especies vulnerables criadas en cautividad por la Estación Experimental de Zonas Áridas (EEZA-CSIC) cuenta con una tasa de supervivencia del 80 por ciento conforme a los datos registrados en los últimos cinco años, en los que se han registrado 224 nacimientos con 42 defunciones entre crías de menos de siete días.

Así lo ha trasladado el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ante la petición efectuada por el PP tras la muerte el pasado verano de cuatro ejemplares amenazados de gacela y un arruí coincidiendo con la celebración de unos conciertos programados por el Ayuntamiento de Almería en un espacio adyacente que fueron rechazados por el órgano científico.

En su respuesta, la entidad científica apunta un mayor porcentaje de defunciones de crías menores de siete días entre las gacelas de Cuvier, con 21 de 82 ejemplares (25,6%) mientras que dicha tasa disminuye entre las gacelas Dorca, con ocho de 43 (18,6%), y entre las gacelas mhorr, con 13 de 99 (13,1%).

Según los datos que maneja el órgano adscrito al Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, el porcentaje de nacimientos con defunciones se sitúa en una media de apenas un cuatro por ciento, con ocho ejemplares de gacela fallecidos en los alumbramientos de los más de 200 asistidos en la Finca Experimental.

Así, el porcentaje global de supervivencia más allá de los siete días de vida en los últimos cinco años roza el 80% conforme las cifras apuntadas por la EEZA en las que se señala una tasa de 82,8% entre las de gacela mhorr, un 74,4% en las gacelas de Cuvier y un 81,4% en las gacelas Dorca.

La entidad señala la edad avanzada de las distintas especies como una de las principales causas de muerte "en la actualidad y en los últimos cinco años", si bien también se han registrado patologías digestivas en el caso de los ungulados de mhorr y otras de carácter respiratorio entre las gacelas Dorca.

También han detallado el bajo coeficiente de consanguinidad medio de las gacelas fallecidas en la Finca Experimental en los últimos cinco años, que se sitúa entre el 0,283 y 0,261 entre las gacelas mhorr y de Cuvier, respectivamente, y del 0,089 entre las gacelas Dorca.

La EEZA también hace constar la situación de sus ejemplares de arruí muflón de Atlas, con un porcentaje de defunción de crías menores de siete días del 30% en los últimos cinco años --13 de 44-- y con un 11% de nacimientos con defunciones, al darse la muerte de cinco ejemplares.

Dicha especie tiene una tasa de supervivencia del 70% más allá de la semana, con un coeficiente de consanguinidad medio del 0,4. La principal causa de muerte en 2024 han sido los abortos seguidos de la edad avanzada y muertes prematuras, si bien en los últimos cinco años la causa global ha sido la edad avanzada.

El PP, a través de los diputados nacionales Ana Martínez Labella y Rafael Hernando, solicitó estos datos apenas un mes después de que la titular del Juzgado de Instrucción nº 2 de Almería abriera diligencias para determinar si existe o no responsabilidad del Ayuntamiento de Almería en torno a la muerte de los ejemplares que, según la EEZA, sufrieron varios episodios de "estrés y agitación" tras los conciertos que se celebraron entre el 19 y 22 de junio.

En concreto, la jueza solicitó al Ayuntamiento un informe relativo a los conciertos que se había celebrado, el informe técnico que avalaba la celebración del evento y las medidas de decibelios que se habían realizado. La investigación se inició a raíz de una denuncia interpuesta por el PSOE, que se ha personado en la causa a la que se han sumado IU-Podemos.

El juzgado también recibió, previo requerimiento también, una copia de los informes de las necropsias realizadas a los ungulados fallecidos por parte de la veterinaria de la EEZA-CSIC. Por su parte, el Ayuntamiento de Almería ha contratado a un veterinario experto para que realice sus propios informes al respecto.

Desde el Área de Cultura que dirige el edil Diego Cruz defendieron el "bajo impacto sonoro" de estos espectáculos aunque, tras la muerte de los ejemplares y las quejas del órgano científico, --que advirtió de posibles efectos adversos antes de los conciertos-- trasladaron el resto de actuaciones musicales previstas para este verano a la Plaza Vieja como medida "preventiva".

Así, según avanzó el Consistorio, los informes de medición y telemetría del limitador que se empleó en los conciertos celebrados indicaban que "no se superaron los 65 decibelios en el exterior de la muralla", por lo que calculaban que en el interior de la Finca Experimental se habrían alcanzado, según sus cifras, unos "58 decibelios", aunque la afección a las especies no ha sido objeto de estudio municipal.