MADRID.- La inversión pública en infraestructuras que recogen los Presupuestos
Generales del Estado (PGE) de 2018 contempla un importe de 8.461,5
millones de euros, lo que representa un 13% más que los 7.483,1 millones
proyectados para 2017. A pesar de este incremento, la cifra se mantiene
en niveles mínimos. No en vano, se trata de la segunda más baja de este
siglo, dice elEconomista.
Superando la inversión en infraestructuras
de 2017, el último año en que se fijó un importe tan bajo fue en 2000,
cuando alcanzó los 7.011,8 millones de euros. En los ejercicios
posteriores la cifra creció ininterrumpidamente hasta los 21.949
millones que alcanzó en 2009. Aquel nivel representa un 159,4% más que
la previsión de 2018 (cerca de tres más).
Desde 2009, la evolución fue en decadencia
hasta 2014.
En 2015, experimentó un punto de inflexión al elevar la
cifra de 8.657,8 millones a 9.438,1 millones. Una subida que se continuó
en 2016, hasta los 9.519 millones, pero que se rompió en 2017 (con los
7.483,1 millones citados).
En la relación con el Producto Interior
Bruto (PIB), la inversión en infraestructuras para este año supone el
0,7%, una décima más que en 2017. Sin embargo, se encuentra por debajo
del 1,1% del año 2000. De hecho, se sitúa incluso por debajo los
ejercicios previos cuando en términos absolutos las cifras eran mucho
menores.
Así, la proporción osciló entre el 0,8% y el 1,1% desde 1995 a
1999, años en los que el importe se ubicó en una horquilla de entre
4.009 millones y 5.479 millones (muy alejados de los 8.462 millones
previstos para 2018).
En cualquier caso, aunque los Presupuestos
marcan la línea, la verdadera medida de la inversión en
infraestructuras la fija la ejecución. Y ésta suele distar bastante de
las proyecciones.
Como muestra, en 2017, la inversión real de los
ministerios de Fomento y de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio
Ambiente, que abarcan el grueso del presupuesto para infraestructuras
del Estado, ascendió a 5.709 millones de euros, lo que implicó 2.189
millones menos que lo previsto, es decir, un 27,7% menos, de acuerdo con
el avance de liquidación de los PGE del último curso.
De ellos, 1.891
millones corresponden al departamento que ahora dirige José Luis Ábalos y
los restantes 297 millones al liderado por Luis Planas -ahora
denominado Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación-.
AVE y carreteras
De
los 8.461,5 millones presupuestaso para este año, los dos ministerios
aglutinan, a través de la gestión directa, un total de 2.834,3 millones,
lo que representa el 33,5% del total. Acoge los programas de inversión
en carreteras, transporte ferroviario, actuaciones en la costa o
infraestructuras y calidad del agua.
Los 5.627,2 millones restantes
atañen a la gestión indirecta de Adif, Adif Alta Velocidad, Enaire,
Puertos del Estado, Seittsa y Sociedades de Aguas. La evolución en los
últimos treinta años de ambos parámetros ha ido acompasada.
La inversión en líneas de alta velocidad
acapara casi la tercera parte, con 2.712,9 millones, lo que implica un
aumento de cerca de 400 millones en relación a 2017. Le sigue la partida
para carreteras (tanto obras como conservación), con 1.912,3 millones,
casi 200 millones más. Entre ambas copan el 54,6% del total.
La semana pasada, el ministro Ábalos se
comprometió en el Congreso de los Diputados a invertir más de 8.000
millones en lo queda de año para cumplir con lo recogido en los PGE,
cuya publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE) se consumó a
principios de este mes. "Nuestra voluntad es que, con carácter general,
el cambio de Gobierno no afecte a los compromisos de inversión y de
contratos", aseguró el titular de Fomento en su comparecencia ante la
Comisión del ramo.
Ábalos incluso señaló que esta previsión es
conservadora y que la cifra podría ser superior, aunque quiso ser
prudente. "No quiero pillarme los dedos", afirmó.
De los más de 8.000 millones, el ministro
concretó que más de 5.000 serán en obras y los restantes 3.000 en
equipamiento, especialmente material rodante ferroviario. La intención
de Ábalos es asumir los Presupuestos del anterior Gobierno.
"Vamos a
intentar que todo funcione", subrayó. "Aunque no he hecho loas al
presupuesto, es el que tengo y tengo la obligación de gestionarlo",
incidió. "Voy a cumplir con su mandato legal y ojalá tenga posibilidades
de mejorarlo y actualizarlo", abundó.
Días atrás, el ministro se comprometió a
continuar con las inversiones previstas en el Corredor Mediterráneo.
Adif había proyectado licitar más de 2.000 millones para el presente
ejercicio, con especial incidencia en la línea entre Murcia y Almería.
No hay comentarios:
Publicar un comentario