ALMERÍA.- El pasado fín de semana tenía lugar la cita anual de la
Delegación diocesana de Manos Unidas y los diferentes equipos
parroquiales de la diócesis de Almería en el salón de actos de la
parroquia de San Luis Gonzága de la capital.
Más de 50 personas,
representando a toda la geografía diocesana, han compartido los
proyectos y actividades para afrontar los dos objetivos primordiales de
esta organización: la sensibilización para la solidaridad y cooperación
al desarrollo y la financiación de proyectos concretos.
La reunión
comenzaba con la oración presidida por el consiliario diocesano Francisco Salazar, a la que siguió la presentación del presidente de la
delegación de Almería Miguel Pérez en la que llamó a “renovar
ilusiones y esperanza en caminar hacia un mundo más justo”.
“Animados
por el camino que marca el Papa Francisco en la Encíclica Laudato
Si sobre el cuidado de la casa común recordamos la íntima relación entre
los daños medio ambientales y la pobreza”, afirmaba el director a todos
los asistentes.
Con la inspiración de esta encíclica, el lema de este
año será: “Quien más sufre el maltrato del planeta no eres Tú, pero
colaborar está en manos de todos”.
La reunión terminó con la
participación de todos los presentes que mostraron sus ilusiones y
dificultades a la hora de encarar esta próxima campaña, pero con las
pilas cargadas para trabajarla en cada una de las parroquias a las que
pertenecen.
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