SEVILLA.- El conflicto que la ministra de Hacienda en funciones, María Jesús Montero, mantiene abierto con Andalucía ha tenido este fin de semana otro capítulo más. Los andaluces que viven en las capitales (excepto los malagueños y almerienses) tendrán que pagar más por el Impuesto sobre Bienes Inmuebles, IBI,
que graban a viviendas, locales y garajes en este próximo año 2020, recuerda hoy Abc.
La
ministra de Hacienda ha firmado un decreto con «medidas urgentes» en el
que obliga a más de mil ayuntamientos españoles, entre ellos a las seis
capitales andaluzas, a subir los valores catastrales de las viviendas,
que son los que establecen la base para el cálculo de este tributo.
Así lo publicó el Boletín Oficial del Estado este sábado con el objetivo de que empiece a aplicarse a partir del próximo miércoles 1 de enero de 2020. Esto significa que las viviendas de Sevilla, Cádiz, Huelva, Córdoba, Granada y Jaén tendrán unos valores catastrales más altos y, por lo tanto, pagarán más impuestos a sus ayuntamientos.
Se trata de una medida sorprendente sobre todo teniendo en cuenta que el propio Gobierno de España en funciones defiende que no puede subir las pensiones hasta que no haya un Gobierno en plenitud de sus facultades legales.
El mismo argumento que defiende María Jesús Montero para no convocar, por el momento, el Consejo de Política Fiscal y Financiera que
tanto demanda el Gobierno andaluz para negociar las condiciones de
financiación de Andalucía y del resto de comunidades autónomas. No
obstante, este Gobierno en funciones sí que puede revisar al alza el
catastro de las capitales andaluzas a juzgar por el decreto urgente
publicado en el BOE de este sábado 28 de diciembre.
Según la tabla
publicada en el BOE, los inmuebles de Sevilla, Huelva, Cádiz, Córdoba,
Granada y Jaén tendrán que sumar un coeficiente de 1,03. Traducido en
porcentajes, eso significa que el Impuesto sobre Bienes Inmuebles, IBI, subirá un 3% en estas ciudades.
Esta
subida se ha calculado dependiendo del último año en el que se revisó
el catastro en estas localidades, ya que hay algunas que no lo hacían
desde los años 90 como es el caso de Córdoba (1995), Cádiz (1996) o
Granada y Jaén que lo hicieron en 1997.
En Sevilla la última revisión
catastral, que provocó otra importante subida en el precio de este
tributo municipal, se realizó en el año 2001.
La actualización
catastral no supone directamente la subida del Impuesto sobre Bienes
Inmuebles que pagan los propietarios de viviendas, locales o garajes en
las capitales porque se trata de un tributo de carácter municipal, pero sí lo hace la valoración del inmueble, que es la base imponible sobre la que se aplica.
Una vez aprobada esta subida del valor catastral de los impuebles urbanos, cada uno de los
ayuntamientos deberán solicitar al Ministerio de Hacienda la revisión
oficial de sus municipios para aplicar esta subida desde el 1 de enero.
Resulta llamativo otro factor a tener en cuenta. Esta subida del valor catastral (que
es un valor legal de referencia que también se utiliza para conceder
hipotecas sobre los inmuebles, o utilizarlos como avales o también para
abonar las cuotas de las comunidades de propietarios) se ha realizado pocos meses después de las elecciones municipales,
con lo que los alcaldes que tendrán que aplicarlos acaban de ser
reelegidos y no se enfrentarán a las urnas hasta dentro de tres años y
medio.
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