SEVILLA.- Andalucía se situó en 2019 como una de las comunidades autónomas donde
más cayó la venta de turismos. En concreto, se vendieron 133.391
unidades, un 10,5% menos que el año anterior, frente al retroceso del
4,8% a nivel nacional. Sólo cinco regiones
–Baleares, Cantabria, Galicia, La Rioja y Navarra, casi todas
uniprovinciales– registraron una evolución peor.
Además,
Andalucía pierde cuota de mercado con respecto al resto de España, ya
que aquí se vendieron el 10,6% de las 1,25 millones de unidades
matriculadas a nivel nacional y el año pasado este porcentaje ascendió
al 11,7%, según informaron las asociaciones de fabricantes (Anfac),
de vendedores (Ganvam) y de concesionarios (Faconauto).
¿A qué se debe esta tendencia más negativa en Andalucía? Si nos atenemos
a la pura estadística, podríamos concluir que la región se ve afectada
por el desplome general del diésel (que cae
un 25,9% a nivel nacional y 27,7% en el sur) y porque aquí también se
reducen las ventas de gasolina, aunque sea sólo un 1,21%.
A nivel
nacional, sin embargo, suben un 2,24%, gracias sobre todo al empuje de
Madrid. Para que se entienda hasta qué punto llega el hundimiento del
diésel en un solamente un año pasa en la comunidad andaluza de representar el 40% de las ventas a ser el 33%. De casi uno de cada dos vehículos vendidos a uno de cada tres.
En este contexto de dificultad del mercado –estamos ante
el primer retroceso de la venta desde 2012, aunque la cifra se mantiene
por encima de 1,2 millones de unidades– hay un pequeño rayo de luz. Los
combustibles alternativos –híbridos, eléctricos y de gas– experimentan
un fortísimo aumento, de casi el 40% a nivel nacional.
Llama la atención, en este sentido, el caso de Andalucía:
aquí los combustibles alternativos avanzan la mitad, un 22%, y es donde
menor es el incremento entre las regiones.
Sin embargo, esto hay que
matizarlo, ya que este menor impulso se debe a que las matriculaciones
de turismos y todoterrenos híbridos, aunque suben mucho, un 24,5%, lo
hacen en mucha menor medida que en otras comunidades autónomas, y además los vehículos propulsados por gas parece que entran en declive y caen un 15,72%.
Frente a todo esto, los eléctricos puros vendidos en 2019 se disparan un 60%, por encima de la media del país.
De eso se deduce que en la región se ha dado un movimiento de compras
hacia esta última modalidad dentro de los combustibles alternativos, en
detrimento de las otras opciones.
En cualquier caso, estamos hablando solo de tendencias porcentuales de fuerte crecimiento en un contexto en el que aún los números absolutos son muy pobres en lo que respecta al coche eléctrico.
En Andalucía, sólo se matricularon 707 vehículos eléctricos puros en
2019, la abrumadora mayoría en Málaga (243) y Sevilla (147). En total,
sólo representan 0,5 vehículos comprados en 2019 de cada cien, o, para
que se entienda mejor, cinco de cada mil.
Aunque los eléctricos crecen más en términos relativos,
lo cierto es que entre los alternativos los híbridos siguen siendo los
predominantes, con 10.594 unidades en 2019. Es un 7,9% del total vendido, una cifra ya apreciable.
Si nos ceñimos sólo a diciembre, las entregas de coches
en Andalucía ascendieron a 10.685 unidades, un 8,2% menos que en 2018,
cuando fueron un total de 11.642. En España, sin embargo, el crecimiento
fue del 6% (105.853 unidades) en la antesala de la entrada en vigor (1
de enero de 2020) de la nueva normativa europea de emisiones. En el
conjunto del país, los últimos cuatro meses han sido positivos, lo que
ha contribuido a amortiguar la caída de las ventas, recuerda Diario de Sevilla.
No hay comentarios:
Publicar un comentario