ALMERÍA.- La compañía Estoil Almería ha proyectado una planta de biocombustible de segunda generación en el término municipal de la capital que una vez puesta en funcionamiento en el primer semestre de 2012, según las previsiones, podría llegar a producir en torno a 37.000 toneladas anuales con los residuos procedentes de la agricultura intensiva de la provincia.
Según ha informado el director gerente de la empresa, Fernando Estrada, el proyecto se encuentra a la espera de que el Ayuntamiento de Almería y el la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía aprueben el expediente de autorización, de forma que las obras de edificación podrían comenzar en un periodo de ocho meses, según estima el responsable.
Las futuras instalaciones, cuyos terrenos se ubican en la zona de Cuevas de los Medina junto a una planta de compostaje, crearán en torno a medio centenar de puestos directos y tendrían capacidad para gestionar unas 200.000 toneladas de residuos, principalmente biomasa procedente de la actividad agraria de la zona, aunque también puede tratarse otros restos como plásticos y rafia que se aprovecharían para generar este biodiésel.
Según Estrada, la puesta en marcha de este proyecto pionero en el que se utiliza un sistema de transformación de origen japonés denominado 'Kurata', en el que se descomponen los materiales que contengan carbono en moléculas más pequeñas para posteriormente reagruparlas en cadenas de hidrocarburo más largas y conseguir el compuesto deseado ya sea diésel, gasolina o queroseno; permitirá también a los agricultores de la provincia abaratar sus sistemas de higiene rural, pues en principio no se prevén costes para ellos.
Desde la entidad se ha precisado además que cuenta con los derechos de uso de esta tecnología en Europa y América Latina, por lo que se pretende explotar esta técnica a largo plazo en otros países del mundo, si bien por el momento se están montado otras plantas en la provincia de Córdoba, dedicada al reciclaje de los restos de las almazaras, y en Cuenca, donde se utilizará como base para el combustible ecológico los aceites usados.
Según las previsiones realizadas por Estoil, la comercialización de este producto será "rentable" tanto para la empresa como para el consumidor, ya que presenta una serie de propiedades que mejoran notablemente el resultado con respecto a los biocombustibles de primera generación. Con respecto a estas plantas, Estrada afirma que "en el momento en el que ha subido la materia prima las plantas ya no son rentables, de hecho, de 25 que había en España quedan operativas dos".
El combustible bio de segunda generación es, según la empresa, más eficiente, más barato para el consumidor, puede usarse en cualquier vehículo y alivia las emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera. No obstante, las previsiones apuntan a las grandes compañías ligadas a los transportes como principales clientes que se completarían con convenios específicos con empresas cercanas al entorno de la planta.
hola buenas tardes , soy pablo curtich de uruguay muy interesante su proyecto pero para abaratar costos no es mas interesante utilizar los aceites de frituras re usados del país de los restaurant y aceiteras empleandole una evaporación de agua y disminuir el agua empleando también grasa vacuna igual sebo mi celular en uruguay es 098138939
ResponderEliminar